El empate del Espanyol en el Carlos Belmonte, con el tanto de la igualada de Quiles en el minuto 93 para el Albacete, se vivió con los ánimos caldeados dentro del vestuario. El descenso y la falta de fichajes provocaron que los nervios estuviesen a flor de piel.
Por ello se unieron una serie de circunstancias que desde la plantilla espanyolista no quieren darles mayor importancia, pero el hecho es que no gustó la presencia de Fran Garagarza en el vestuario del Carlos Belmonte tras concluir el partido.
El director deportivo del Espanyol bajó al vestuario a hablar con el equipo y Luis García le invitó a que abandonara el vestuario. Alguno de los presentes asegura que no hubo tensión con los jugadores y si un encuentro cordial para analizar el partido.
Eso sí, Garagarza templó asperezas con un grupo de aficionados pericos que estaban en la grada del Belmonte, a los que le pidió confianza en la plantilla y que animaran al equipo.
