El estadio Gran Canaria vio a Vitolo el pasado domingo roto de dolor y llorando desconsolado ante lo que casi podía parecer una despedida del fútbol después de pasar un calvario de lesiones que le impide jugar con regularidad desde hace casi tres años. El extremo de Las Palmas comenzaba pidiendo perdón a la afición y explicando lo que siente: "Lo estoy intentando, estoy trabajando, estoy entrenando y me estoy dejando todo lo que tengo por volver a sentirme jugador. Como todos saben volví a sentir unas molestias que me apartaron de lo que más me gusta en esta vida, jugar al fútbol".
Mis compañeros son testigos de que me dejo todo en los entrenamientos y mi familia de que me cuido como el que más para volver a estar sobre el césped como hace años... pero no está siendo posible
Algunos aficionados han criticado a Vitolo y al club, al entender que esta situación, sólo ha jugado 105 minutos en siete partidos en la presente temporada, se veía venir, y el '7' no ha dudado en responderles: "Sé que hay gente crítica, que no entiende nada, pero tampoco lo entiendo yo. Mis compañeros son testigos de que me dejo todo en los entrenamientos y mi familia de que me cuido como el que más para volver a estar sobre el césped como hace años... pero no está siendo posible".
No quiero dejar esto sin que mis hijos puedan verme feliz de nuevo
Vitolo seguirá luchando para volver a ser el que fue "sobre todo por mis hijos", dijo, "no quiero dejar esto sin que ellos puedan verme feliz de nuevo". El extremo que militó en el Sevilla o el Atlético de Madrid despidió su carta con unas palabras sobrecogedoras: "Las lágrimas y el dolor de ayer son inexplicables, nunca me había sentido así", sentenció.
Los compañeros le arropan
No sólo Jonathan Viera, que el mismo día del partido le consoló en el vestuario, sino todos los compañeros de equipo, incluso los que militaron con él otros años, no han dudado en mostrar su apoyo público a Vitolo, que este lunes se ausentó de la comida de Navidad de la primera plantilla de Las Palmas.
Siempre en tu barco hermano, sé que estás esperando por mí, más contigo que nunca
Desde Diego Costa a Sergio Araujo, pasando por un sinfín de futbolistas que han arropado a Vitolo en las últimas horas tras verle roto de dolor sobre el césped del Gran Canaria. Pero, entre ellos, hay un mensaje muy especial. Es el de Kirian Rodríguez, compañero de plantilla que se recupera de un linfoma de Hodgkin: "siempre en tu barco hermano, sé que estás esperando por mí, más contigo que nunca". Pronto esperan jugar juntos y ayudar a Las Palmas en lograr el ascenso a Primera división.