Tras 18 días sin competir y con siete partidos en las próximas 23 jornadas, el Atlético comienza su particular Gran Vuelta. Los colchoneros tendrán el pistoletazo de salida a una carrera hasta el próximo parón de selecciones que se dividirá en siete etapas, dos correspondientes a la fase de grupos de la Liga de Campeones y cinco a LaLiga EA Sports.
Con un calendario tan apretado a Simeone no le queda otra que dejar a un lado su tan famoso partido a partido en lo que a las alineaciones se refiere y la única solución para salir victorioso de todas estas citas parece que será la de las rotaciones. Así se verá en Mestalla, donde el preparador colchonero aterrizará mirando de reojo a la cita del martes en Roma ante la Lazio. Por ello, tras un viaje transoceánico y haber disputado los dos partidos completos con su Selección, Nahuel Molina apunta al banquillo y dejará su puesto a Azpilicueta. Tener un defensa de la talla del navarro permite esta temporada al técnico rojiblanco dar descanso a Molina, futbolista que no tuvo sustituto durante la pasada campaña.
También se esperan cambios en la medular. Al obligado de Llorente por el lesionado De Paul habrá que sumar la opción de que Lemar ocupe el puesto de Saúl, quien podría descansar pensando en la Lazio. Los dos estarán junto a Barrios, quien seguirá siendo el motor del equipo tras su exhibición en Vallecas y por la ausencia de Koke. Finalmente, Griezmann estará acompañado de un Morata que llega enrachado y Giménez esperará su oportunidad en el banquillo.
Baraja con lo justo
El Valencia tratará de reencontrarse con la versión que mostró en las victorias ante Sevilla y Las Palmas, e incluso la que exhibió en la segunda mitad contra Osasuna pese a la derrota. Aunque los choques ante el Atlético son palabras mayores. Al menos desde hace nueve años. Son 17 partidos seguidos sin ganar a los de Simeone, que perdieron por última vez ante los blanquinegros en 2014, con Nuno en el banquillo y Peter Lim recién aterrizado en Valencia. De los seis últimos, cinco derrotas y un empate 3-3 que cedió el Atlético en Mestalla.
Baraja apenas ha contado con ocho jugadores del primer equipo durante el parón y no porque tenga muchos internacionales, sino porque tiene una plantilla corta, como él mismo ha recordado últimamente. Por eso, las lesiones de Foulquier y Paulista se notan. Podría optar por Mosquera en la defensa -que ha estado trabajando en Paterna las dos últimas semanas- y podría ser el estreno en el once de Canós. Los últimos fichajes -Amallah y Yaremchuk, que vienen de sus selecciones, lo tienen más complicado para salir de inicio, pero sí tienen opciones de entrar desde el banquillo.
