El Elche asalta el ascenso directo y amarga el estreno de Ramírez con el Zaragoza

El Elche asalta el ascenso directo con éxtasis en el Martínez Valero. El equipo ilicitano venció por la mínima al Real Zaragoza, en el estreno de Miguel Ángel Ramírez en el banquillo maño, con un gol de Rashani en el tiempo añadido, lo que supone su quinta victoria consecutiva en el Martínez Valero, incluida la goleada copera a Las Palmas. Con muchas dificultades para desarrollar su juego, ante un rival competitivo, los franjiverdes demostraron que viven un estado de gracia y asaltan así la segunda posición en la clasificación. Además, suman una inyección de moral de cara a los octavos de Copa frente al Atlético. Tras un partido tosco y con una actuación arbitral que no gustó a nadie, el 'mazazo' se lo llevaron los maños, que siguen en tierra de nadie y sólo suman un triunfo en las nueve últimas fechas.

En la primera mitad, hubo igualdad de fuerzas. El Elche, con las ideas más claras, estuvo bien plantado, aunque sin la brillantez de otros días. Le costaba desarrollar su fútbol ante un Zaragoza combativo, pero falto de continuidad en el juego. Los franjiverdes tuvieron más y mejores ocasiones para adelantarse, en las botas de Salinas y Nico Fernández y en la cabeza de Affengruber. Por su parte, los maños inquietaron con sendos tiros lejanos de Aketxe y un disparo de Iván Azón, todavía jugador del conjunto zaragocista pese al interés del Como, taponado por la zaga local.

Tras el descanso, el Zaragoza dio un paso al frente. Asumió más posesión e imposibilitó, salvo en momentos puntuales, que el Elche desarrollara su estilo. Sin embargo, no supo traducir esta superioridad en opciones claras de marcar, más allá de un remate alto de Liso. De hecho, el cuadro ilicitano anduvo más cerca del gol, con una volea a bocajarro de Nico Castro y un testarazo de Bigas que Poussin neutralizó.

En la recta final, con muchas interrupciones por faltas, el cuadro de Eder Sarabia puso más ahínco para llevarse los tres puntos, y los acabaron logrando gracias a un cabezazo de Rashani a centro de Rodri Mendoza. Dos revulsivos que desataron la alegría en un Martínez Valero que sigue soñando con el ascenso a Primera.

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