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El Eibar se despidió de su afición con una sonrisa tras vencer al Córdoba en un partido entretenido y con mucho ritmo. Desde enero de 2024 llevaba sin encadenar tres triunfos seguidos y ayer pudo hacerlo gracias a los tantos de Corpas, Bautista, por partida doble, y Chema. Obolskii hizo el único tanto del equipo andaluz, que encadena la racha opuesta a los armeros: tres derrotas consecutivas.
Las propuestas de San José e Iván Ania ayudaron a que se viera un juego con mucho ritmo y con ocasiones. Comenzaron mejor los andaluces, encontrando la manera para progresar por dentro con un Magunazelaia muy activo, aunque la primera situación clara fue del Eibar a balón parado pero Pascual no estuvo acertado en la definición.
Las dos siguientes fueron de los visitantes con Obolskii como protagonista. Primero con una gran maniobra dentro del área que finalizó con un disparo que se marchó rozando el palo y segundo con un remate al primer toque que obligó a Magunagoitia a intervenir. Eran los mejores minutos de los andaluces. El Eibar no era capaz de robar y San José aprovechó el ‘cooling break’ para ajustar la presión.
Aunque el gol que abrió la lata poco tuvo que ver con los ajustes del técnico armero y sí con una genialidad de Corpas. El jienense vio adelantado a Marín y se sacó un derechazo desde su saca para levantar a todos los aficionados de sus asientos poco antes del descanso.
Los armeros fueron a más
Salió mejor el Eibar tras la reanudación, pero el que golpeó fue el Córdoba. Una buena circulación terminó con un pase de Carracedo sobre Obolskii, que esta vez no perdonó. Entonces empezó la fiesta de Bautista.
El ariete, recién renovado hasta 2027, quiso celebrar su continuidad con un doblete. Y con el partido sentenciado, llegó el momento de despedir a Matheus, que fue ovacionado y no pudo contener las lágrimas. Chema puso la traca final con un gol a balón parado.
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