- Reportaje. Las 'amenazas' de la vieja guardia
El Sevilla ha regresado esta mañana al trabajo en la Ciudad deportiva, tras la tarde de descanso que concedía su entrenador, después de aterrizar el miércoles a mediodía desde Eindhoven. Y no ha tenido excesivas buenas noticias Mendilibar, quien estuvo un buen rato hablando con Mariano Díaz, antes de que el delantero se retirase al gimnasio por unas pequeñas molestias musculares, lo que puede apartarlo definitivamente del encuentro ante el Rayo del sábado, el último antes del parón de selecciones. También entrenó en solitario Erik Lamela, por lo que el ataque del Sevilla ante el equipo madrileño se tendrá que parecer mucho al visto frente al PSV en Champions.
Al técnico vasco no le ha caído bien esas nuevas molestias de Mariano, que ya le obligaron a perderse algún partido tras su debut con el Sevilla, en la Champions frente al Lens. Mendi ha podido comprobar en los entrenamientos que el ex del Real Madrid, cuando alcance un punto de forma en el que pueda encadenar partidos sin problemas físicos, le va a ser muy útil. Es un jugador con movilidad en tres cuartos, facilidad para encontrar los espacios en el área y la mejor definición de los delanteros disponibles en la plantilla. Quiere verlo desde el inicio y si es el punta que tanto busca.
Esto no quiere decir que haya descendido su confianza en En-Nesyri. Todo lo contrario. Es un enamorado de todo lo que ofrece el marroquí al Sevilla, aunque en momentos de partido necesita un delantero con mayor inteligencia dentro del área para todo lo que produce su equipo en ataque, dado que Youssef es más de buscar siempre el remate por alto, mientras que sus compañeros de banda, en los centros laterales, también piden desmarques al primer palo para rematar de primeras con el pie. Dentro del puzzle del gol en el Sevilla, quien va perdiendo crédito semana a semana es un Rafa Mir que pidió a gritos salir en verano y que ni siquiera le abrirán la puerta en enero, con la marcha de En-Nesyri a la Copa de África. Mendilibar espera a Mariano, su esperanza para mejorar los números anotadores del Sevilla.