Ser el abanderado de tu país en unos Juegos Olímpicos, un orgullo que recordará el resto de su vida el italiano Gianmarco Tamberi, y no solo por lo que supuso deportivamente. El saltador de altura tuvo el honor de ondear la bandera italiana a orillas del río Sena junto a la esgrimista Arianna Errigo. Sin embargo, en un descuido el transalpino perdió su anillo de boda, que cayó al río Sena.
El atleta junto a su mujer lamentaron el hecho con un mensaje en sus redes sociales, quedándose en una anécdota graciosa. "Demasiada agua, demasiados kg perdidos en los últimos meses o tal vez el incontrolable entusiasmo de lo que estábamos haciendo. Probablemente las tres cosas, solo el hecho de que lo escuché desfilar, lo vi volar... La seguí con una mirada hasta que la vi rebotando dentro del barco. Un destello de esperanza... Pero lamentablemente el rebote iba en dirección equivocada y flotando más de mil veces en el aire la vi zambullirse en el agua como si fuera el único lugar donde quería estar", así comenzó el mensaje Tamberi lamentando la pérdida de su anillo, que quedará por siempre en París.
El italiano, que hizo historia en los Juegos Olímpicos de Tokio tras colgarse el oro junto al catarí Essa Barshim con una marca de 2'37, apostó por la imaginación sacando su lado más poético para disculparse a la altura de la grave situación.
Volando mientras intentaba llevar la tricolor italiana lo más alto
"Pero si tenía que suceder, si realmente voy a perder esta fe, no podría imaginar un lugar mejor. Quedará para siempre en el lecho del río de la ciudad del amor, volando mientras intentaba llevar la tricolor italiana lo más alto posible durante la ceremonia de apertura del evento deportivo más importante del mundo. Si tuviera que inventar una disculpa nunca habría sido tan imaginativo", continuaba Tamberi.
El atleta consiguió dar su lado más poético, al igual que optimista de la situación. "Creo que podría haber un gran lado poético en las fechorías de ayer, y si quieres, lanzaremos el tuyo a ese río, también, para que estén juntos para siempre, y tendremos una excusa más para, como siempre has pedido, renovar nuestros votos y casarnos con nuevos", sellaba Tamberi.
Quizás haya dejado su anillo de boda, sin embargo, quedará en vano si logra revalidar el metal logrado en Tokio: "¡¡¡Que sea auspicioso volver a casa con oro aún más grande!!!", terminaba el comunicado el italiano, que arrancará la competición el próximo 7 de agosto con los clasificatorios y la final el domingo 10 de agosto.