Llegan los 'repostajes' a la Fórmula E: la recarga ultrarrápida se estrena en Jeddah

Ya es oficial. La Fórmula E introducirá en el próximo E-Prix, la cita doble en Arabia Saudí (14 y 15 de febrero), una de las más importantes novedades tecnológicas en los 10 años de historia de la competición eléctrica: las recargas ultrarrápidas.

Se denominarán oficialmente Pit Boost y básicamente se trata de un 'repostaje' en versión eléctrica. Los monoplazas tendrán que pasar obligatoriamente por boxes para recuperar un 10% de energía (una operación que debería llevar unos 30 segundos, que serán 34 en total con la parada y el arranque) y poder continuar la carrera. 

Obligatoria en una de las dos carreras

La tecnología de recarga ultrarrapida que utilizará la Fórmula E es mucho más avanzada que la que se puede usar ahora mismo en los vehículos eléctricos de calle (donde la potencia promedio de recarga ronda los 150 kWh y las máximas están en torno a 250): los monoplazas recuperarán en ese medio minuto 3,85 kWh, lo que significa una potencia de 600 kWh.

La recarga ultrarrápida será obligatoria en una de las dos carreras de los fines de semanas con cita doble (Jeddah, Mónaco, Tokyo, Shanghai,Berlín y Londres), de modo que se convertirá en un factor estratégico más que permitirá darle un toque especial a una de las carreras respecto de la otra. 

Los 'repostajes' se combinarán con el Modo de Ataque y la ventana de vueltas para realizarlo se fijará antes de cada carrera.La única limitación es que los dos monoplazas del mismo equipo no podrán realizar la operación de recarga a la vez. La recarga la ejecutarán dos mecánicos más un tercero encargado de detener y dar salida al monoplazas en el pit lane.

Demostración tecnólogica

El Pit Boost es una tecnología que la Fórmula E lleva trabajando más de dos años para poder aplicarla y que, además de un elemento más de la idiosincrasia de los E-Prix, pretende servir como demostración de las posibilidades de la propulsión eléctrica aplicada a los coches de calle.

De hecho, uno de los obstáculos principales que los conductores encuentran a la hora de pasarse a los coches eléctricos es, además de la infraestructura de recarga, los tiempos de espera para recuperar energía para las baterías.