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En los últimos años han decidido retirarse dos ilustres campeones. Primero se marchó Kimi Raikkonen, que se coronó con Ferrari en 2007. El carismático piloto finlandés decidió que en Alfa Romeo escribiría el epílogo de su carrera. Lo hizo en 2021 cuando sumaba 42 primaveras. Al curso siguiente le tocó el turno a Sebastian Vettel. El de Heppenheim colgó el casco a los 35 años tras rubricar dos campañas mediocres con Aston Martin. Seb logró cuatro títulos con Red Bull (2010, 2011, 2012 y 2013).
El club de los 300
Pues bien, en 2023 sólo habrá tres campeones en la parrilla. Lewis Hamilton (38 años, siete coronas), Fernando Alonso (41, dos títulos) y Max Versappen (25, dos entorchados). Y de esos tres, sólo dos han disputado más de 300 grandes premios a lo largo de sus respectivas trayectorias. Evidentemente hablamos de Alonso y de Hamilton. El ovetense es el piloto con más carreras de la historia de la F1. Lleva ya 356, mientras que el de Stevenage atesora 310.
Por ende, este par de genios del volante optan a lograr algo inédito en la clase reina del automovilismo. Ningún piloto de los que corrieron más de 300 grandes premios lograron ganar tras superar esa abultada cifra.
Nadie lo hizo antes
Los precursores que no encontraron la gloria en sus respectivas etapas crepusculares fueron Raikkonen (350), Rubens Barrichello (323), Michael Schumacher (307) y Jenson Button (306). Y ojo que Vettel se quedó en 299, pero lo cierto es que el alemán estuvo lejos de ganar vestido de verde (firmó un meritorio 2º en Bakú en 2021).
A priori, Hamilton, plusmarquista en victorias (103), parte con ventaja para poner fin a esta maldición. El '44' se quedó a cero en 2022, pero lo lógico es que Mercedes le proporcione este año un coche mucho mejor que el W13.
Mientras, Alonso debutará con Aston Martin y lo lógico es que necesite un periodo de adaptación... aunque soñar es gratis. ¿Llegará, al fin, su triunfo 33?