Carolina Marín avanza con paso firme en su regreso a la competición. Cada día recuerda más a la Carolina de siempre, a la campeona que acumula cinco oros europeos consecutivos y que va hacia el sexto, aunque ella insista en que hay que ir "partido a partido". Su primera víctima, 333 días después de su grave lesión en la rodilla izquierda, fue la checa Katerina Tomalova. La tumbó en 29 minutos. Hoy, en octavos, ha dejado en el camino a la ucraniana Maria Ulitina, número 59 del mundo, a la que se ha impuesto por 21-7 y 21-8 en 22 minutos.
Y en las gradas, por segundo día consecutivo, la familia de Carolina volvía a lucir las camisetas rojas y el mensaje ¡Vamos Carolina!. Y de nuevo el público coreó su nombre para animarla, aunque había menos ambiente que en su estreno. La hora, en plena jornada laboral, no acompañaba.
Nadie diría que es su segundo partido tras once meses sin competir. Nueve minutos tardó en adjudicarse el primer set. Fue un visto y no visto. Desde el principio se la vio plena de confianza y salió en modo arrollador. En un suspiro se colocó 6-0 y llegó al intervalo nueve puntos arriba. Se la vio cómoda subiendo a la red, desde la línea de fondo, en el remate y en el revés. El nivel de la ucraniana estaba a años luz del de la campeona olímpica y el luminoso no engaña: 21-7.
En el segundo, la tricampeona mundial siguió en modo apisonadora y lo cerró 21-8. Se la vio incluso queriendo alargar alguna jugada y luego confesó que era para tener más rodaje ya adaptarse a las condiciones, ya que la rival de cuartos es más complicada que sus dos víctimas hasta ahora.
"Estoy contenta por cómo he podido controlar el volante porque iba muy rápido. Las sensaciones han sido mucho mejores hoy. Después de casi un año sin competir echaba de menos las sensaciones y los nervios", confesó Marín tras el partido.
Las sensaciones han sido mucho mejores hoy., después de casi un año sin competir echaba de menos los nervios
Su nueva caja de herramientas
Ayer, con un remate en salto, sorprendió a todos, incluido Fernando Rivas, su entrenador desde hace más de 14 años. Hay detalles en esta nueva Carolina que demuestran que tiene más recursos que antes. "La Carolina de ahora tiene muchos más recursos que antes. He ampliado mi caja de herramientas durante la lesión. A veces sorprendo a todos, incluso a mí misma. Es verdad que casi nunca lo hago. Pero todo es porque me siento suelta sobre la pista", dijo sonriendo.
La Carolina de ahora tiene muchos más recursos que antes, he ampliado mi caja de herramientas
Tras el partido toca hacer el análisis táctico de su rival en cuartos, la danesa Line Hojmark Kjaersfeldt, número 33 del mundo y verdugo hoy de Beatriz Corrales. Será el noveno enfrentamiento entre ambas. Los ocho anteriores cayeron del lado de la española. "En mi cabeza ya estará todo más claro con ese partido virtual que me hago y en cuanto elaboremos la táctica, me sentiré todavía con más confianza", dijo.
Peñalver y Corrales dicen adiós al Europeo
Carolina Marín es la única superviviente de la 'Armada' española en el Europeo de Madrid. Kike Peñalver ha caído en octavos ante el danés Anders Antonsen, número 3 del mundo y que hoy celebraba su 25 cumpleaños, por 13-21 y 15-21.
Y Beatriz Corrales perdió ante la también danesa Line Hojmark Kjaersfeldt por un doble 21-12.
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