En pleno corazón del barrio de Malasaña, uno de los lugares más queridos por los amantes de la música era la Sala Barco. Sin embargo, el local echó el telón el pasado domingo, 23 de marzo, después de tres décadas de historia en la que muchos artistas disfrutaron de un ambiente ideal y en el que todos los géneros se unían en un mismo lugar.
Un cierre que se produce en un contexto sociopolítico en el que Malasaña es uno de los principales puntos de la capital que está sucumbiendo al turismo masivo. Una situación que tiene como resultado esta pérdida de la identidad madrileña como bloques de piso dedicados a la especulación inmobiliaria con el alquiler para turistas y un barrio que gira por y para los visitantes, desde los negocios hasta los locales.
El músico German Omaechea, conocido como DjModerno, habló de este asunto en sus redes sociales: “Muy buenas, chicos. Me paso por aquí para contar una noticia un poco triste y es que una de las residencias donde pincho habitualmente aquí en Madrid, en el barrio de Malasaña, la Sala Barco, anuncia su cierre”.
Omaechea: “Era una gozada pinchar en la Sala Barco”
El DJ fue el encargado de tocar el pasado jueves y viernes en la última semana con vida de la sala. “Da mucha pena porque es un local que durante muchos años ha apostado pre pandemia a diario y post pandemia de miércoles a domingo por la música en directo: conciertos, sesiones, eclécticas, libertad artística. Yo ahí me la he gozado pinchando funk, disco, house, hip hop... No había una línea editorial clara como tienen otros clubes y el público siempre ha sido muy abierto de mente y lo ha bailado todo”, aseguró.
“La verdad es que era una gozada pinchar en la Sala Barco y da mucha pena que eche la persiana. Va un poco en línea con todo lo que está pasando con el barrio de Malasaña, viviendas turísticas, franquicias… Un acoso y derribo por parte del distrito centro y la policía, que siempre busca excusas para multar locales”, añadió el músico.
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