El Gobierno de Nicolás Maduro arrestó el sábado por la noche a dos españoles cerca del aeropuerto de Puerto Ayacucho, en Venezuela, por su presunta vinculación con el CNI. Se trata de José María Basoa Valdovinos y Andrés Martínez Adasme, a los que se acusa de tener relación con una dirigente de los comandos antichavistas e incluso, según las autoridades venezolanas, en su teléfono hay pruebas de que piden información sobre dónde comprar explosivos para asesinar a una alcadesa proMaduro.
El ministro del Interior de Venezuela, Diosdado Cabello, aseguró que el CNI pretende "captar" a terroristas para atentar en su país y llegó a afirmar que los dos españoles detenidos ya estaban confesando su supuesta vinculación con el Centro Nacional de Inteligencia. "El CNI está metido hasta el cuello en la operación y en sus planes está la eliminación física del presidente Maduro", aseguró. La CIA, según Cabello, está detrás de toda la estrategia.
España niega cualquier vínculo con el CNI
El Gobierno español desmintió de forma tajante cualquier vinculación de osé María Basoa Valdovinos y Andrés Martínez Adasme con el CNI. La embajada española en Venezuela envió una nota verbal a las autoridades venezolanas para concretar los cargos concretos. Además, insistió en que protegerá los intereses de cualquier ciudadano español que se encuentre en el territorio. Son horas complicadas para la diplomacia.
De hecho, esta detención llega después de que España reconociera al opositor Edmundo González como el presidente electo del país. Desde entonces, la istración de Nicolás Maduro ha tensado las relaciones entre ambos territorios, provocando una incertidumbre tanto política como empresarial, con gigantes como Repsol, que desde 1993 opera en Venezuela para extraer petróleo y gas.
Por otra parte, El Mundo ha ado con el padre de uno de los detenidos por Maduro, que ha insistido en que su hijo se encontraba de vacaciones en Venezuela y ha negado de forma tajante que trabaje para el CNI.
Comentarios