Tradicionalmente en España, una de las problemáticas para las personas de más de 50 años que se quedaban sin empleo era encontrar un trabajo que se ajustase tanto a sus pretensiones como a lo que la empresa buscaba dentro de sus perfiles. Una circunstancia que provocó que el Gobierno de España, dentro de su sistema de prestaciones y pensiones, impulsase el subsidio para personas mayores de 52 años.
A pesar de que anteriormente era para los mayores de 55 años, finalmente se tomó la decisión de restarle tres años a esta cantidad. Con el objetivo de que estas personas mantengan un nivel de vida básico, esta medida ha sufrido varias modificaciones en los últimos tiempos, en los que el Ejecutivo ha seguido impulsando cambios.
Una prestación que está sujeta a unos requisitos básicos, como el hecho de tener 52 años o más en la fecha de la solicitud, tener agotada la prestación contributiva por desempleo, sumar seis años de experiencia laboral en España o no recibir rentas superiores al 75% del salario mínimo interprofesional.
Asimismo, también podrán acceder a este subsidio los emigrantes retornados, aquellos que tienen una cotización insuficiente para prestación contributiva o víctimas de violencia de género, sexual o cualquier tipo de violencia ejercida por padres e hijos.
Los subsidiarios podrán trabajar a jornada parcial o completa
Con una cuantía equivalente al 80% del IPREM (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples), este subsidio dura hasta que se alcance la edad ordinaria exigida para tener derecho a la jubilación. Para cobrar esta ayuda, habrá que estar inscrito durante todo el tiempo como demandante de empleo en el SEPE.
No obstante, la novedad más importante de cara a este 2025 es que se ha establecido la compatibilidad de trabajar a jornada parcial o completa y cobrar esta ayuda. Una situación que se ha llevado a cabo para impulsar el trabajo entre las personas de 52 o más años.
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