Desastre absoluto: el Barça se despeña ante el colista y la Copa está en el filo

El Barcelona no tiene remedio. Es un desastre absoluto. Ni siquiera pudo ganar el colista Bàsquet Girona, al que vencía por 10 (75-85) a falta de 3:40. Se acabó suicidando en otro final apretado, decidido, crueldades del destino, por 91-90, el mismo marcador que en la derrota de hacía 48 horas ante el Joventut. Hasta el azar parece burlarse de los azulgranas, a los que la presencia en la Copa del Rey se les ha puesto muy cuesta arriba. Como a Joan Peñarroya su continuidad en el banquillo.

Al Barça le restan dos encuentros para evitar la tragedia. El próximo domingo debe visitar al Dreamland Gran Canaria y en la jornada antes del corte copero recibe al Surne Bilbao Basket. Está al borde del precipicio y la caída sería histórica, porque nunca faltó a la Copa. Nada menos que eso se está jugando.

Pero que el despojo en que se ha convertido el Barcelona no oculte la gesta del Girona, que ganó a los azulgranas por primera vez desde su regreso a la Liga Endesa. Mejorados desde la llegada de Moncho Fernández al banquillo, los gerundenses hicieron un gran baloncesto, especialmente en la primera mitad. Su efectividad fue asombrosa, aunque ayudó la ridícula defensa mostrada por su rival.

Recital del Girona hasta el descanso

Al descanso, el Girona sumaba 51 puntos, cuando hasta ahora era el segundo equipo de la Liga Endesa que menos anotaba (77,0 de media). Sus porcentajes fueron bestiales: 13/17 en tiros de dos y 8/14 en triples. Llegó a ganar por 10 (47-37), dominaba el rebote, los tiradores lanzaban solos y las penetraciones se sucedían sobre una alfombra roja. Iroegbu, Durham y Susinskas eran los referentes.

Willy Hernangómez, que no jugó en toda la segunda parte pese a la baja de Vesely, volvió a quedar muy señalado en cuestiones defensivas. Hasta el paso por los vestuarios, sólo Anderson estaba enchufado en el Barça (13 puntos hasta entonces y 25 al final).

Cambia el viento

Pero después el partido giró. Se vieron los primeros brotes verdes en la intensidad del Barça, despertaron Punter y Parker y un 2+1 del segundo puso a su equipo arriba por primera vez: 56-58. Había tardado 26 minutos en mandar. Soplaba el viento a favor de los azulgranas, que seguían contando con la inspiración de Anderson, se unieron también los centímetros de Fall y la efectividad de Metu.

La suma de todo ello pareció encarrilar con ese 75-85 a falta de 3:40. Pero no se rindió el Girona, que se reenganchó con un 8-0. Juan Fernández consumó la remontada (89-88). Dos tiros libres de Metu a falta de 26 segundos volvieron a voltear el marcador. E Iroegbu, a la media vuelta tras abortar una penetración consumó la debacle azulgrana con dos segundos por jugarse. Parker, a la desesperada, falló un triple sobre la bocina. Otro desastre del Barça. Van muchos muy seguidos dentro y fuera de la pista. Lo peor es que pueden ser más y mayores.

Ficha técnica

91 - Bàsquet Girona (28+23+13+27): Irogebu (25), Marcos (10), Fjellerup (13), Susinskas (7), Fernández (11) -cinco inicial-; Durham (7), Martínez (-), Geben (9), Busquets (3), Sibande (2) y Nnaji (-).

90 - Barça (20+24+27+19): Satoransky (7), Punter (15), Anderson (25), Parker (9), Hernángomez (6) -cinco inicial-; Núñez (1), Metu (11), Parra (2), Fall (10), Brizuela (4) y Abrines (-).

Árbitros: Perea, Manuel y Sánchez Mohedas.

Incidencias: Partido de la decimocuarta jornada de la Liga Endesa disputado ante 5.288 aficionados en el Pavelló de Fontajau, en Girona.