Miles Bridges podría volver a jugar con los Hornets este sábado después de haber cumplido 30 partidos de suspensión por un grave incidente de violencia doméstica ocurrido en junio de 2022. La NBA consideró que ya había cumplido dos terceras partes de su castigo mientras permaneció como agente libre durante la temporada pasada.
La franquicia de Charlotte ha emitido un comunicado anunciando que el jugador estaría disponible para medirse a los Bucks. Dicen además sentirse "cómodos con que Miles vuelva a jugar según nuestro conocimiento actual de los hechos de las acusaciones recientes y permanecemos en o con la NBA a medida que el asunto avanza a través del proceso judicial".
El entrenador Steve Clifford ya había dicho esta misma semana que Bridges iba a tener "un papel importante de inmediato" en un equipo que actualmente marcha con un balance de 3-7. Celebró además el regreso de quien en su última temporada jugando, la 2021-22, fuera el máximo anotador y el máximo reboteador del equipo con 20,2 puntos y 7,0 capturas de media por encuentro.
Todo es satisfacción en los Hornets, que volvieron a firmar al alero el verano pasado pese a los antecedentes que tenía. Bridges fue arrestado por presuntamente pegar una paliza a la madre de sus hijos y provocarle graves lesiones. Él mantuvo su inocencia durante todo el caso, pero en ningún momento refutó en los juzgados el cargo de delito grave de violencia doméstica.
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