- Ciclismo El vídeo en el que anuncia su adiós
Omar Fraile (Santurtzi, 1990) dice adiós al ciclismo profesional tras más de una década en la élite, donde ha dejado una huella imborrable. El vizcaíno, que debutó en 2013 con el Caja Rural, fue creciendo hasta convertirse en un todoterreno fiable y combativo, capaz de brillar en grandes escenarios. En su palmarés figuran etapas en el Tour de Francia (inolvidable su victoria en Mende en 2018), el Giro de Italia, el Tour de Romandía o la Itzulia, además de un maillot de la montaña en la Vuelta a España. Corrió en equipos como Caja Rural, Dimension Data, Astana y, en su última etapa, Ineos Grenadiers, donde ha compartido equipo con figuras como Egan Bernal o Carlos Rodríguez. Siempre generoso en el esfuerzo, se marcha orgulloso de lo conseguido y con la certeza de haber encontrado su sitio en el pelotón.
En uno de los mejores momentos personales de su vida, el corredor que empezó en Orbea en 2012 ha tomado una decisión que llevaba tiempo madurando: colgar la bicicleta. El corredor vasco del Ineos Grenadiers, conocido por su entrega en carrera y por ser uno de los grandes cazadores de etapas del ciclismo español en la última década, pone punto y final a su trayectoria profesional con la misma honestidad que le caracterizó en cada escapada.
“Cumplo 35 y me estoy perdiendo muchas cosas que no vuelven
“Estoy feliz. Poder pasar tiempo con mi familia, con mi mujer e hijos es un poco el motivo por el que he tomado esta decisión”, explica a MARCA pocas horas después de anunciar su adiós. Lejos de la tristeza o la nostalgia, Fraile transmite paz. “No tengo ninguna espina clavada. Creo que he cumplido mis expectativas, incluso más de lo que pensaba cuando pasé a profesionales. Estoy muy feliz por todo lo que he logrado”, expone desde el otro lado del teléfono.
Creo que he cumplido mis expectativas, incluso más de lo que pensaba cuando pasé a profesionales
El 'click' definitivo lo dio al comprobar cómo crecen sus hijos sin poder estar con ellos como le gustaría: “Esta profesión hace que no puedas pasar tiempo con ellos. Cada vez que vuelves de un viaje les ves crecer y eso se hace difícil, porque ese tiempo no vuelve. Hay muchas cosas que luego puedes recuperar, pero eso no. Que tus hijos tengan dos años no vuelve. Me apetece disfrutar de ellos. Esto ha sido el punto de inflexión. Cumplo 35 y me estoy perdiendo muchas cosas”.
No quiero ser director: me retiro en parte para no estar 200 días fuera de casa
Con el paso del tiempo, los silencios se han transformado en emociones más explícitas. “Ya el mayor tiene tres años y medio y cada vez que me voy a entrenar o a competir pone pucheros y no quiere que me vaya. Hasta ahora no me decía nada, pero ahora se me hace difícil. Se te va ablandando el corazón”, señala cariñoso.
“Los jóvenes tienen otra forma de correr. A los de mi generación nos cuesta adaptarnos
Pero no solo pesa lo emocional. También lo mental. “Psicológicamente es muy difícil. Necesitas pasar muchos días fuera de casa y eso hace que cada día cueste más. Al final, pasaré al año 100 días fuera de casa. Pero para estar al nivel de los grandes tienes que estar 200 días fuera. Y esos son muchos. No estoy dispuesto a hacer tanta concentración en altura y por eso cuesta llegar al nivel de ellos.
La exigencia del ciclismo moderno también ha sido un factor determinante en su decisión. “Entrenas, haces todo perfecto y aun así tienes que hacerlo mejor para llegar a un nivel en el que todavía estás lejos. Los jóvenes tienen otra forma de correr. Los que venimos de un ciclismo anterior, nos cuesta adaptarnos. Antes se aguantaba más, pero ahora...”.
“Me retiro para disfrutar de mi familia. Ver crecer a mis hijos vale más que todo
Aunque cuestiona hasta dónde pueden llegar esos jóvenes cuando el cuerpo y la mente les pasen factura con los años, ira profundamente a algunos de ellos. “Son gente muy metódica, con un nivel de sacrificio exagerado, tanto Carlos Rodríguez como Egan Bernal, por ejemplo que son de mi equipo, son personas a las que ademirar. Son gente que tiene que estar a un nivel de preparación altísimo. Los jóvenes deberían fijarse en ellos porque son muy buenos”.
“Ganar en Andalucía tras meses complicados fue uno de los momentos más especiales
Fraile se marcha con momentos que guardará siempre. Uno de los más especiales llegó recientemente: “Un momento importante en mi carrera deportiva es durante esta última fase. Por ejemplo cuando conseguí ganar en Andalucía después de varios meses en los que personalmente no me encontraba bien. Estos últimos años los he disfrutado. Más allá de las victorias en Giro y Tour, que siempre son importantes, este último momento también ha sido bonito".
“Carlos Rodríguez y Egan Bernal son un ejemplo para los jóvenes
A lo largo de su carrera, ha sabido encontrar su lugar a pesar de no encajar en los moldes típicos del ciclismo español. “Me costó mucho en su día encontrar un hueco porque estaba muy marcado lo que tenían que ser los corredores aquí. Me costó encontrar el hueco, pero lo encontré. La verdad que he logrado ganar mis etapitas, he sido un corredor que ha estado con los líderes. Y me marcho contento y bien. He encontrado mi sitio”.
Entre los muchos compañeros que ha tenido, hay uno al que siempre recordará con especial cariño: Mark Cavendish. Sobre él rescata la mejor anécdota con un líder, "aunque todos han sido muy buenos". Expone: “Siempre recordaré una anécdota cuando llegué a Dimension Data. No sabía casi nada de inglés y Cavendish me acogió y me arropó. Me hablaba en italiano, me acompañaba a los sitios, siempre me decía que fuera con él. Que alguien así se preocupara por mí fue muy especial. Es un cacho de pan”.
“Cavendish me acogió como un hermano cuando no sabía inglés. Es un cacho de pan
La decisión de decir adiós (y hacerlo público este jueves) ha generado una ola de cariño que le ha emocionado profundamente. “He tenido muchos mensajes hoy. Me está sorprendiendo mucho lo que estoy recibiendo, gente que me dice que les ha gustado mi carrera deportiva. Y eso es bonito. Me está gustando mucho y me siento querido”.
Pese a dejar la competición, no se desvinculará del todo del ciclismo, aunque tiene claro que no será desde el coche de director. “No voy a estar metido de director, porque si me retiro es para no estar tantos días fuera de casa... Me gustaría estar relacionado con el ciclismo pero quiero pasar tiempo en casa”.
“Me siento querido: los mensajes de este jueves me están emocionando muchos
Planes de futuro
Por ahora, su retirada no es inmediata. Aún quedan días de competición. Su calendario pasa por la Itzulia, algunas clásicas y una última gran meta: la Vuelta a España. “Estoy cubriendo huecos dentro del equipo. Mi objetivo real es la Vuelta a España. Estoy sin un calendario realmente definido. Ahora hago País Vasco y luego algunas clásicas. Iré tapando huecos que haya y luego mi intención es llegar bien al verano. Ahora es un poco ir día a día, cubriendo los espacios que me pide el equipo. Fui a Cataluña porque me llamaron a última hora cuando no entraba en mis planes. El equipo necesitaba un perfil como el mío con todas las lesiones que ha habido y yo por supuesto acepté de buen grado", explica.
Así, sin hacer ruido, pero con un gran legado y dejando imágenes icónicas para el ciclismo español como sus dos triunfos en Giro-Tour, Omar Fraile se despide del pelotón. Un ciclista que, sin estridencias, supo ganarse el respeto de todos y encontrar su sitio en la historia reciente del ciclismo patrio.
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