La paciencia de Elon Musk parece haberse colmado ya. Los ataques que instalaciones y propietarios de Tesla están sufriendo en las últimas semanas -que tuvieron su episodio más agresivo en Las Vegas con un ataque con cócteles molotov a un centro de la marca- han hecho estallar al hombre más rico del planeta... que ha manifestado públicamente su hartazgo.
Su fuerte implicación con la candidatura republicana de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos y us participación ahora de forma efectiva en el gobierno -además de su toma de partido en Alemania por la extrema derecha- han creado un caldo de cultivo que en Estados Unidos se ha llevado al extremo hasta el punto de que incluso los propietarios de un Tesla pueden ser objeto de las iras de los anti-Musk.
Imaganes de una protesta de activistas anti-Tesla en Fort Lauerdale, Florida..CRISTOBAL HERRERA-ULASHKEVICHEFE
Un ejemplo bastante gráfico de todo ellos son las imágenes que circulan por las redes sociales con modelos de Tesla 'camuflados' con logotipos de otros fabricantes, como Toyota, Audi o BMW.
Musk pide detenciones
El caso es que el magnate sudafricano parece haber llegado a su límite y ha pedido que las fuerzas del orden intervengan... contra la raiz del problema. "Ha llegado la hora de arrestar a los que fomentan los ataques", escribió en su red social X (Twitter) junto a unas imágenes en las que se ve a ciudadanos americanos increpando a un conductor de un Tesla Cybertruck.
"Detener a sus marionetas y a sus soldados a sueldo no va a hacer que pare la violencia", añade, en una alusión clara a que esos ataques están organizados, como se puede leer más claramente en otra publicación de Musk, también apoyada por imágenes: "Son, literalmente, manifestantes pagados", asegura.
El fin de semana ha sido 'caliente' contra Tesla, con más de 200 protestas repartidas por todo el territorio estadounidense. Incluso se ha llegado a bautizar como el Tesla Takedown movement (movimiento para el derribo de Tesla que, pese a su denominación se define como "pacifista") que ha tenido también ramificaciones por Canadá y Europa.
