El Alcorcón sigue trabajando con pies de plomo en el mercado de fichajes, con las miras puestas en conseguir armar la plantilla más competitiva posible en el año del retorno del cuadro amarillo a la Segunda División del fútbol español. Y el próximo futbolista que podría firmar por el conjunto alfarero es el mediocentro internacional camerunés Yan Eteki, de 25 años, que milita en el Casa Pia de la Primera portuguesa y que, tal y como ha podido saber MARCA, tiene muy avanzada su llegada a la entidad amarilla.
El interés del Alcor en el centrocampista africano lo adelantó este domingo el periodista portugués Pedro Sepúlveda. Y dicho y hecho: fuentes cercanas a las negociaciones afirman a este diario que el futbolista, que juega como pivote, tiene encarrilada su llegada a Santo Domingo. Eso sí, la incorporación todavía no está cerrada y faltan por limarse los últimos detalles de su fichaje.
Un portento físico
Eteki responde al perfil del clásico mediocentro africano. Es todo un portento físico, capaz de abarcar mucho espacio en el centro del campo y que se desempeña con brillantez tanto en ataque como en defensa. El pasado verano, fichó por el Casa Pia desde el Granada, con el que estuvo tres temporadas en Primera División en España y llegó a jugar Europa League. En invierno, sin embargo, y después de disputar 17 encuentros en la Primeira Liga, se fue cedido al Cartagena, aunque no consiguió hacerse un hueco en tierras murcianas (10 encuentros en toda la segunda vuelta, solo cuatro de titular) y ha regresado al cuadro portugués, que, si nada cambia, le va a enviar ahora al Alcorcón.
En los últimos siete años, Eteki, que ha jugado dos partidos con la selección absoluta de Camerún, ha disputado 190 encuentros en el fútbol profesional español: 79 en el Granada (entre Primera y Copa del Rey), 33 en Almería (en Segunda y en Copa) y 109 en el Sevilla Atlético, donde se empezó a hacer un nombre como futbolista. A la ciudad hispalense, por cierto, el mediocentro africano llegó desde el Leganés, club de una región, el sur de Madrid, a la que ahora tiene casi todas las papeletas de regresar.
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