El Barcelona formó este martes con el siguiente once: Iñaki Peña, Araujo, Koundé, Íñigo Martínez, Cancelo; Pedri, Frenkie de Jong, Gündogan; Raphinha, Lewandowski y Joao Félix. Un once solvente que sirvió para que el equipo ganara al Oporto y se clasificara para los octavos de Champions y virtualmente como primero de grupo. Sin embargo, más allá de estas consideraciones, esta alineación tiene otras lecturas.
Barcelona 2-1 Porto: resumen y goles | Champions League (J5)
La primera es que no había ningún futbolista formado en La Masía entre los jugadores de campo. Solamente el portero, Iñaki Peña, se había formado en las categorías inferiores del club. Los cinco canteranos que tiene Xavi en la plantilla no salieron en ese once: Sergi Roberto, Oriol Romeu, Lamine Yamal, Balde y Fermín. El técnico prefirió la veteranía y dejó a los chavales en el banquillo, mientras que los dos primeros no suelen entrar mucho en el once. La última vez que había sucedido esto fue en 2018.
Hay otra lectura más. Y es la ausencia de jugadores catalanes en ese once. Ninguno de los que jugaron de entrada frente al Oporto ha nacido en Catalunya. Los cinco canteranos antes citados son los que precisamente han nacido en esta región. No es nada habitual. La última vez que eso sucedió en la Champions League fue hace 21 años y después de 216 partidos disputados en esta competición.
Pasó el 23 de abril de 2002, en el partido de ida de una semifinal de la máxima competición continental que enfrentó al Barcelona con el Real Madrid en el Camp Nou y en el que vencieron los blancos por 0-2. Charly Rexach, entrenador por aquel entonces de los azulgranas, alineó el siguiente once: Bonano, Reiziger, Abelardo, Frank de Boer, Motta, Rochemback, Cocu, Luis Enrique, Overmars, Kluivert y Saviola. Al igual que en esta ocasión no hubo ningún catalán en el once.
