- Guía. Glosario MARCA de la analítica avanzada en el fútbol
- Así es el Liverpool (I). Intensidad y una alta línea atrás liderada por Van Dijk
En la primera entrega de nuestro análisis del Liverpool desde el punto de vista táctico-estadístico hablábamos de cómo se comportaba el equipo de Klopp en fase defensiva. En esta segunda nos centraremos en la fase de creación. Para ello veremos primero el estilo de juego.
Ese estilo pasa por la verticalidad. Le gusta el juego rápido y el contraataque. Pero eso no choca con su gusto por tener la pelota. Su tiempo medio de secuencia de pases es de casi 11 segundos en el que da casi cuatro. Además, es el sexto de las grandes ligas que da secuencias de más de 10 pases (670, por detrás de City, PSG, Marsella, Real Madrid y Chelsea).
Sin embargo, sabe cuándo imprimirle velocidad a la jugada. Sus jugadores tienen la suficiente calidad para manejar la posesión del esférico, además de hacerlo rápido y con precisión. En este gráfico de radar podemos ver bien este estilo. La línea de puntos es la media de la Premier, por lo que destaca en casi todas las áreas. Su estilo de Juego Rápido es un 63% superior al resto.
Por eso no está entre los más 'lentos' construyendo sus ataques. Esa compensación se ve muy clara en este gráfico de la Premier.
Por otro lado, su posesión media es de un 63%. Solo Bayern, Barça y City tienen más en las grandes ligas. Pero esto no es lo más llamativo. Porque más que tener posesión, lo importante es dónde se tiene. Y para eso debemos hablar de un concepto: la inclinación del campo.
A través de esta métrica podemos saber cuánto porcentaje de posesión tiene un equipo en el último tercio del campo respecto a sus rivales, lo que supone una aproximación a lo amenazante que son esas posesiones. El Liverpool 'inclina' los campos a su favor un 68,5%. Solo el City tiene un porcentaje más alto en el Big-5. Por tanto, toca mucho el balón, pero además lo hace en gran medida cerca del área rival.
Todo empieza con Alisson y Van Dijk
Todo esto es una labor de equipo completa. El juego empieza con Alisson, un portero que participa en el inicio de la fase ofensiva, con una media de 33 pases por encuentro. Su juego con los pies es más que aceptable y, su misión es tratar de buscar siempre a Van Dijk. Apenas busca en largo salvo que vea una opción clara de sacar ventaja. De ahí que sea el quinto portero del Big-5 con menos porcentaje de pases en largo (16,6%) según datos del CIES a través de InStat.
Como decimos, Alisson busca a Van Dijk, al que ha dado 416 pases, al que más de todos. El neerlandés es la clave para la salida de balón, gracias a su versatilidad, bien porque conecta sin riesgos con los centrocampistas, bien por su visión y precisión en el desplazamiento en largo, con el que consigue romper líneas de presión rival.
Todos le buscan. Sus dos compañeros más cercanos, Robertson y Matip, realizan con él las dos combinaciones de pases más altas del equipo (1.012 y 987, respectivamente).
Cuando quiere jugar hacia adelante busca mucho a Thiago por el suelo, pero no rehuye el pase en largo. Ha enviado esta temporada un total de 258, una media de 5 por partido, siendo 158 de ellos satisfactorios.
Pero destaca mucho su clara preferencia por el costado derecho donde asoman Salah y, sobre todo, Alexander-Arnold. Al egipcio le ha enviado 32 balones.
Y al inglés le ha servido 42.
Suponen el 12% y 16% respectivamente. Pero lo más sorprendente es que todos ellos, los 74, han sido satisfactorios.
Amenaza lateral
Otro de los puntos que marcan el estilo de creación del Liverpool está en el papel que juegan sus laterales y que enarbolan la bandera del cambio de roles de esta posición. El ser dos jugadores de largo recorrido con el propósito defender y apurar línea de fondo en ataque para centrar ha variado.Trent Alexander-Arnold y Andrew Robertson se han convertido en jugadores vitales en la creación de juego, además de su aportación ofensiva.
Solo hace falta echar un vistazo a sus mapas de calor para ver cómo ocupan muchas zonas interiores entre el medio del campo y el área rival. A la izquierda, el de Arnold; a la derecha, el de Robertson.
Eso explica que no son meros carrileros que se pegan a la banda esperando un pase para correr, sino que participan en la elaboración del juego. Participan en el 61,5 % de las secuencias de juego abierto del Liverpool (el segundo más alto de la Premier detrás del Manchester City con un 64,1 %) y crean algo más del 35 % de sus oportunidades, el más alto de cualquier equipo inglés.
Sobre todo hay que destacar a Arnold, que se acerca más a los mediocampistas. De hecho, juega más por dentro, dejando que sea Salah el que se pegue a la cal. Por eso no extraña que haya tenido más toques que cualquier otro jugador del Liverpool en esta Champions: 853 en ocho partidos disputados.
Por eso, la posible baja de Thiago hace que su rango de pase sea aún más crucial para el juego de creación del Liverpool. Además, cuanto más participe, más obligará a Vinicius a retrasar su posición para ayudar a que a Mendy no le hagan un 2 contra 1 entre él y Salah, lo que alejaría al brasileño de su zona de acción.
Pero lo de estos dos laterales no es solo participar con los del medio campo. Su nivel de peligro es muy alto. Lo de Arnold es como para estar pendiente de él. Ha sido el segundo mayor asistente de la Premier (12, a una de Salah), y el primero en asistencias esperadas, esa métrica que mide cuánto de creativo es un jugador. Entre todas las competiciones, 18 asistencias.
Pero como las asistencias solo se producen si un compañero marca, podemos saber su cuota de peligro a partir de otros parámetros que evalúan su aportación sin tener que depender de los demás. Así, ha sido también el mejor en amenaza esperada y en amenaza esperada a través de sus pases. Esto nos viene a señalar su importancia a la hora de hacer progresar el balón a través de sus acciones. Por si fuera poco, es también el futbolista que más ocasiones ha generado, con 90 (por delante de Bruno Fernandes y De Bruyne) y el que más centros exitosos, con 35.
Su compañero Robertson no ha sido menos. Su perfil es algo distinto pero no por ello ha dejado de producir 15 asistencias en todas las competiciones.
En Champions, el escocés ha generado 19 pases clave (cualquier pase que genera un remate), más que nadie del Liverpool junto a Salah y por delante de Alexander-Arnold (16). El Real Madrid deberá tener cuidad con sus centros.
Thiago y su gran cambio
En esta fase de creación no podemos olvidar la labor de los centrocampistas y, de entre ellos, Thiago es el eje de todo. El internacional español es una seria duda y sería una baja muy dura para el equipo. Ya contamos hace poco que estaba en el mejor momento de su etapa de 'red' y que había crecido mucho en el aspecto defensivo. Pero también ha recuperado su mejor versión a nivel creador, dando pases más decisivos e incluso asistencias, algo que no se vio el curso pasado.
Thiago sigue siendo una referencia a la hora de crear juego. Van Dijk lo sabe y por eso, cuando juega en corto, le busca. Entre ellos tiene la novena combinación de pases más frecuente con 598 entregas, siendo 378 del defensor al medio.
La zona de influencia de Thiago es grande pese a estar escorado a la izquierda. Ahí ha dado 406 pases esta temporada, 385 de ellos con éxito.
Su posible baja, junto a la de Fabinho,mermaría una línea de medios firme. Milner es un jugador cumplidor, que aporta intensidad. Y Keita suple con garantías al brasileño. Pero bajarían un escalón el nivel del equipo en esa zona del campo. El sábado saldremos de dudas.
* Datos de Opta, Soccerment, InStat y Wyscout