El último día del mercado de fichajes siempre es un día apasionante para los aficionados al mundo del fútbol, pero no siempre pueden ver cómo se vive dentro de los clubes el cierre de una contratación cuando faltan escasas horas para que se dé por finalizado el periodo de inscribir futbolistas en nuestro campeonato.
Por fortuna, el Getafe ha querido mostrar a sus aficionados cómo fueron las frenéticas horas en el Coliseum Alfonso Pérez el pasado 1 de septiembre, día en el que in extremis y a contrarreloj se cerró la incorporación del mediático fichaje de Mason Greenwood procedente del Manchester United.
Todo comenzó a falta de 3 horas y 37 minutos, cuando un Antonio Sánchez, Director General del Club, y Ángel Torres negocian el fichaje del jugador inglés y explican qué es lo que faltaría para que cerrar el fichaje junto con un intermediario del futbolista.
Más de 3.000 personas en el Coliseum para la presentación de Greenwood, Óscar Rodríguez y Diego Rico
Para ello primero debe ser habilitado en la Federación al no haber jugado nunca en España como indica el Director de Operaciones del conjunto azulón José Antonio Ramírez, que a las 21.45 horas reconocía que la situación estaba complicada al faltar unas operaciones que de normal suelen llevar entre seis y siete horas en tiempo récord.
Un proceso que consistía en que Greenwood fuera recibiendo toda la documentación y la devolviera firmada para que el club la revisara y la diera por buena.
El desarrollo de las operaciones exigía una gran labor de equipo entre los que estaban presentes en las oficinas del club como en Inglaterra para poder cerrar el fichaje en hora y ser jugador del Getafe para la 23-24.
Momentos de tensión vividos entre los directivos del club y el intermediario a medida que las horas iban pasando y desde Inglaterra iban llegando los documentos firmados, tanto el contrato con el club como el permiso de trabajo necesario para jugar en España.
Para que a falta de seis minutos Ángel Torres estampara la última rúbrica y el Director General el ok procedente de Mánchester para confirmar el fichaje a pesar de un último imprevisto desde la Federación Inglesa que necesitaban la confirmación, algo que terminó llegando y se terminó celebrando, primero por parte de los presentes en las oficinas y posteriormente en los aledaños del estadio getafense con la afición que vitoreaba al presidente por la llegada de Greenwood.
