Sant Andreu y Europa han protagonizado una nueva edición del derbi ‘La Vila contra el Poble’ en el que se han medido estos dos barrios de Barcelona, otrora pueblos independientes, en un encuentro decisivo por el ascenso a Primera RFEF.
El partido terminó en empate (1-1) con los goles de Jordi Cano para el Europa y de Marc Jurado para el Sant Andreu en un estadio Narcís Sala que colgó el cartel de ‘no hay billetes’ en pocas horas para el partido más importante de la temporada. 6.531 espectadores entre los que se encontraban los ‘Desperdicis’, el grupo de animación local que rivalizaba con los ‘Eskapulats’, del Europa.
El encuentro, además, se venía calentando por lo sucedido en la primera vuelta. Una caída de una valla publicitaria del Nou Sardenya e incidentes entre aficiones en los aledaños del estadio europeo acabó propiciando el aplazamiento de un partido que se terminó a puerta vacía y con victoria para el Sant Andreu (4-6).
Una historia centenaria para una rivalidad ‘moderna’
Poco antes de las 16.00h ya se escuchaban los primeros cánticos a favor del Europa por parte de sus aficionados en la cercana Plaza del Raspall. Algo más tarde, en La Rambla de Sant Andreu, un espectacular coreo andreuenc acompañó a los aficionados locales hasta el Narcís Sala.
“El Europa es un sentimiento de barrio. Muchos de aquí éramos del Barça y al final nos hemos acabado enamorando de este fútbol de barrio. Es otra historia”, nos confiesa un veterano aficionado del Europa. “Nosotros somos más grandes que ellos, es un hecho. El orgullo de barrio está en juego”, afirma un aficionado del Sant Andreu.
Los ‘recuerdos’ al rival fueron constantes en un derbi entre barrios de Barcelona que luchan por mantener vivo su histórico pasado independiente a través de sus clubes.
Ambos barrios de la Ciudad Condal fueron en su día poblaciones independientes: Sant Andreu del Palomar y la Vila de Gràcia, ambas incorporadas a la capital catalana el mismo día: el 20 de abril de 1897, fecha en la que se hizo efectiva su anexión.
Desde entonces pelean por mantener viva su idiosincrasia particular, algo que se refleja también en sus dos equipos, centenarios. Aunque llevan más de medio siglo sin pisar el fútbol profesional, Sant Andreu y Europa ahora se pelean por escalar al tercer escalafón del fútbol español.
Los hoy locales vivieron su mejor época entre 1969 y 1977, cuando lograron permanecer ocho temporadas seguidas en Segunda división. El Europa, por su parte, presume de ser uno de los clubes fundadores de la Primera División española. Su histórica final de Copa en 1922-23 le permitió competir en las tres primeras temporadas de LaLiga (1928-29, 1929-30 y 1930-31). Nunca volvió a la División de Oro, pero siempre tendrá el honor de ser fundador de nuestra Primera división y de ser el primer rival del Real Madrid en Liga. 5-0 para los blancos el 10 de febrero de 1929 en el estadio de Chamartín.
A pesar de esos viejos laureles, la rivalidad entre Sant Andreu y Europa es más reciente, surgida en la primera década del siglo XXI. Recientemente esa rivalidad ha ido en aumento por haber compartido Liga -y destino- en varias ocasiones. Por ejemplo, en la temporada 2022-23 ambos ascendieron de Tercera a Segunda RFEF. En aquella ocasión el Europa lo hizo como campeón de Liga y el Sant Andreu en el playoff de ascenso.
Dos años después, encontramos de nuevo a los barrios barceloneses en lo más alto de la clasificación, pero en esta ocasión para subir a Primera RFEF.
El Europa se acerca al ascenso
Con cinco jornadas aún por delante, el Europa ha mantenido su ventaja de un punto sobre su rival en el derbi ‘La Vila contra el Poble’ y, de paso, ha mantenido una racha de 18 años sin perder en casa de su rival, en siete encuentros que han disputado (Cinco empates previos, la temporada pasada ganaron y la actual, empate)
Ahora han dado un pasito más y se mantienen en la primera plaza de Segunda RFEF, la única que da ascenso directo a Primera RFEF.
Al Sant Andreu le queda ahora esperar un tropiezo de sus rivales al frente de la tabla para no acabar, como la temporada pasada, en un duro playoff por el ascenso.
En definitiva, una jornada de fútbol popular entre dos equipos barceloneses que protagonizaron un espectacular día de fútbol. El orgullo de barrio pone rumbo a la Primera RFEF.
Comentarios