El virus FIFA ha pasado por encima del Real Madrid. Dos jugadores están en la cuerda floja, Ramos y Varane, los dos centrales titulares, especialmente el capitán, con vistas a los dos próximos partidos, la visita a La Cerámica este sábado para medirse al Villarreal y sobre todo la cita ante el Inter en San Siro, el próximo miércoles dado que Militao sigue aislado por el covid (su positivo se hizo oficial hace ya 16 días, el pasado 2 de noviembre) y Nacho sale de una lesión aunque ya se entrena con el grupo.
El Real Madrid está sobre todo pendiente de Ramos y la prueba que se hará mañana en Valdebebas para conocer el alcance exacto de su lesión. El jugador no parece tener una lesión muy importante en el bíceps femoral, pero la idea es someterse a una resonancia para saber mejor el alcance. El capitán se retiró al filo del descanso tras sentir dolor en la parte anterior del muslo derecho. Tras una primera exploración no parece una rotura muy importante, pero será complicado que llegue al duelo del Inter dado que ante cualquier lesión muscular leve harían falta una semana o diez días para recuperarse.
Por su parte, Varane se quedó en el vestuario ya en el descanso en el partido que enfrentó a Francia con Suecia tras dañarse el hombre en una caída. También se hará pruebas mañana aunque en su caso parece que se trata de un contratiempo menos importante que el de Sergio.
Tanto Ramos como Varane, como marca el protocolo del Madrid, se quedan hoy en su casa para pasar un test PCR antes de incorporarse mañana al trabajo con el resto del grupo para evitar cualquier riesgo de contagio si fueran positivos. Lo normal es que los resultados no arrojen sorpresas y los dos estén mañana en Valdebebas.
Zidane tampoco está contando esta semana con Casemiro, también con covid desde el pasado 7 de noviembre, y sería una de las opciones para el centro de la zaga si se recupera. El entrenador confía en recuperarle ya para la cita del sábado.