Una prolongación para disfrutar y enmarcar

Córdoba y Levante firmaron tablas en un increíble partido en El Arcángel, con múltiples cambios de guion en un tramo final en el que se pasó de un penalti anulado por el VAR a favor de los blanquiverdes al tanto en el añadido de Álex Forés que parecía catapultar al Levante.

 Pero un gol de Rubén Alves, y el larguero luego en un trallazo de Carlos Espí hizo que el partido, al final, acabase con 2-2.

Tras un arranque de mucha cautela entre los dos contendientes, el Levante dejó muestra de su capacidad de decidir arriba pasado el primer cuarto de hora. En un mal toque de Xavi Sintes para Carlos Marin, Brugué, más rápido y de cara al balón, marcó a puerta vacía.

Luego, después de unos minutos alelado por el sopapo, el Córdoba se fue arriba por el empate y lo mereció. Casas estrelló un espectacular chut en el larguero y Andrés Fernández le hizo una gran tapada, a bocajarro, a Albarrán en un córner. 

Con todo, y aunque empezó a tirar de veteranía y a jugar con el reloj, el Levante también generó las suyas, con Morales como ejecutor. Perdonó en un remate en el área y luego no conectó con Brugué porque Carlos Isaac se cruzó de manera providencial. Los locales empujaron mucho y forzaron córneres, pero sin fruto.

Reacción local

En la segunda mitad, Pedro Ortiz empató pronto con un gran disparo al primer palo y enardeció a la hinchada, aunque el partido se mantuvo en equilibrio. Llegaron los cambios y Álex Forés perdonó en un remate desde fuera del área de Kochorashvili, mientras Carlos Isaac también rozó el tanto en un gran disparo.

El duelo, que ya era bonito dejó lo mejor para el final. Palencia Caballero decretó un penalti de Elgezabal a Theo Zidane que corrigió tras consulta en el VAR. Carlos Marín salvó un gran disparo de Carlos Espí, mientras en el añadido Álex Forés sí clavó desde fuera del área el 1-2. 

El Córdoba tiró de orgullo y, a la heroica, impidió la séptima victoria granota en ocho partidos con un cañonazo de Rubén Alves. Con todo, aún hubo tiempo, casi en el minuto 100, para otro remate genial de Carlos Espí que escupió el larguero. Pura Segunda División, pura 'Hipertensión'.