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Una presentación diferente. Los abonados que hacían cola en las oficinas de El Molinón para renovar su carnet de socio no esperaban la sorpresa que les aguardaría en el interior. Vestido con la equipación rojiblanca se encontraba Haissem Hassan dispuesto a hacerse fotografías o firmar todos los autógrafos que le solicitaran. De este modo, el Sporting hacía oficial a su segunda incorporación del verano.
El extremo francés llega en calidad de cedido hasta final de temporada por parte del Villarreal, club con el que primero renovó hasta 2025, y recala en Gijón con ilusión. "Estoy muy feliz. Llevo tiempo hablando con el club para llegar. Tengo mucha ilusión de empezar la temporada y hacerlo bien", contó el galo.
Como objetivo, Hassan no se pone límite. "Tengo muchas ganas de ayudar a devolver al club a Primera, que es donde tiene que estar. Para mí este un club de Primera. Tengo muchas ganas de demostrar mi nivel", dijo.
Una afición de Primera
El extremo ya sabe lo que es jugar en El Molinón. Un estadio que hoy volvió a visitar y que le despertó buenos recuerdos. "Cuando jugué aquí con el Mirandés o con el Villarreal, el campo siempre estaba lleno y tenía muy buen ambiente. Estoy muy feliz de estar aquí. Es un club y una ciudad de Primera división", finalizó.
Esta tarde se pondrá Hassan por primera vez a las órdenes de Miguel Ángel Ramírez en el primer entrenamiento de la semana. Un entrenamiento en el que también podría estar Róber Pier. El central gallego, que llegaba ayer a Gijón, pasaba esta mañana los reconocimientos médicos. Falto de trabajo grupal desde su salida del Levante, Pier busca sumarse cuanto antes al ritmo de la plantilla para empezar a competir por un puesto en el once titular de Miguel Ángel Ramírez.