En Roland Garros hay una estatua que preside junto a los mitos de Francia que elaboran la gran historia de uno de los lugares con más magia en el mundo del deporte. Rafa Nadal, historia del deporte español y mundial, al lado de los Mosqueteros del tenis galo y del propio Roland Garros, aviador de la Primera Guerra Mundial. Allí quiere colarse un boxeador español, el que rompió la mala racha historia que perseguía al pugilismo patrio desde Sidney 2000. La sequía de metales desde Rafa Lozano la rompió Enmanuel Reyes Pla. 'El profeta' 'que daba palos' sube al Olimpo.
Desde que pisó los Juegos de París tenía una cosa en la cabeza: parecerse a la leyenda de la estatua Rafa Nadal. Y ya está cerca porque las finales se disputarán en el emblemático complejo del Bois de Bolougne. "Quiero esa foto para el boxeo español. No una estatua como Nadal, pero sí la foto con la medalla de oro", reclamó al terminar.
Quiero la foto con el oro al lado de la estatua de Rafa Nadal
Reyes Pla se soltó definitivamente. Celebró desde el inicio, cortó las alas de Schelstraete que fue a menos hasta terminar sin nada físicamente. 'El Profeta' le llevó a bailar y castigó con combinaciones. "Nos vino el combate con Han porque me quité lastre, pude boxear mejor y conectar golpes más la derecha. Él quería combinar, pero yo estaba preparado", analizó.
Es el gran premio del chico que salió de Cuba para perseguir un sueño. "España me dio todo y este triunfo va para el gran museo del deporte español. Me dieron la oportunidad y estoy contento y orgulloso por conseguirlo", reivindicó. Cambió la decepción y el enfado de Tokio por la alegría, los grandes golpes y firmar el podio.
Un despertar definitivo tras los años de desierto después de la medalla de Lozano. "Él me dio confianza y ahora le damos el regalo más grande. Tanto yo como los compañeros que seguiremos cerrando medallas. Confiamos en ellos", sentenció. Hay un nuevo medallista en París 2024 y es Enmanuel Reyes Pla. Y la opción de Rafa Lozano Jr., José Quiles y Ayoub Ghadfa sigueviva.