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Si se retrocediese en el tiempo, ni el más desconfiado hubiera imaginado este final de temporada en Aston Martin. El equipo británico sufrió en Austin y México no ha sido un bálsamo sobre el que refugiarse. Los dos coches verdes rodaron al fondo de la parrilla durante gran parte de la carrera, hasta que por un motivo u otro, ambos acabaron abandonando y regresando a boxes. Aún quedan tres oportunidades para conseguir revertir una situación impredecible hace algunos meses.
Con esa mentalidad se presentará Fernando Alonso en Brasil, después de haber abandonado por segunda carrera consecutiva por un problema de fiabilidad. El asturiano es consciente de que el equipo no está a su mejor nivel, pero sigue confiando en el equipo que le devolvió a los podios de manera habitual, con cinco en siete carreras a principio de temporada.
"No queda otra que trabajar. Este año está finiquitado, lo doy por bueno. No creíamos posible estar por delante de Ferrari o de Mercedes, de un coche que ha hecho seis o siete poles esta temporada y aún estamos por delante en el campeonato de pilotos. Esa es la parte positiva", explicaba Alonso a los medios, tras otro final de carrera abrupto.
No creíamos posible estar por delante de Ferrari o de Mercedes, de un coche que ha hecho seis o siete poles esta temporada
El fin de semana se antojaba complicado desde las dos sesiones del viernes. Parece que al equipo de Silverstone le cuesta acoplar las piezas al monoplaza y encontrar un set-up competitivo. En Austin lo hicieron tras romper el parque cerrado, pues el ritmo de Stroll lo demostró. Tan importante es traer novedades como integrarlas de forma correcta en el AMR23. Definitivamente, hoy no fue el caso. Tampoco la suerte estuvo del lado del asturiano.
Alonso reconoce el bajón de final de temporada
"Una carrera muy difícil, teníamos poco ritmo todo el fin de semana y creo que hemos cogido alguna pieza del coche de Pérez y nos ha afectado en la aerodinámica. Ya íbamos regulín y encima, pasamos por encima de esas piezas. El abandono de Austin y el de aquí pesan mucho en el campeonato", analizaba sobre la pérdida de rendimiento al inicio de la carrera.
El abandono de Austin y el de aquí pesan mucho en el campeonato
Ahora, la pelota está en el tejado del equipo, que ha exculpado a sus pilotos y ha reconocido que el monoplaza es complicado de conducir. La temporada de Aston Martin esconde una parte más negativa, aunque Alonso aún apela al trabajo de todos en la fábrica en las tres carreras que restan. "Hemos tenido una bajada de prestaciones en estas últimas carreras, pero estamos intentando recuperar el nivel. Toca seguir trabajando".