Eran el producto que venía a cambiar el mundo tal y como lo conocíamos y quizá el mundo no estaba preparado para ellas. Los primeros días después de que las Vision Pro salieran a la venta supusieron una completa revolución. Las redes sociales se llenaron de innumerables vídeos con los s aplicando diferentes funciones del nuevo elemento de Apple. Pero con el paso del tiempo, no todo parece tan bonito como hacían presagiar.
El problema no reside en las ventas de las Vision Pro, que al tratarse del nuevo producto de Apple, se han comercializado más de 200.000 unidades en poco más de una semana. La cuestión está en que muchos s han decidido devolverlas cuando se han dado cuenta que no pueden sacarle todo el rendimiento que un principio enseñaron o simplemente porque no han quedado conformes.
Los motivos de los s para devolver las Vision Pro
La mayoría de los compradores se han puesto de acuerdo en un detalle: el tamaño de las Vision Pro. No todos los ciudadanos tienen el mismo tamaño de cabeza, por lo que tener una talla universal no es sencillo. Uno de ellos muestra en su cuenta de X, antes Twitter, que existen diferentes adaptadores personalizados, pero cada uno tiene un valor de 200 dólares. Teniendo en cuenta el gasto desembolsado ya en las Vision Pro...
En segundo lugar, los s creen que las Vision Pro han llegado demasiado pronto al mercado. A pesar de tener un gran número de funciones disponibles, no pueden usarse debido a que el resto de plataformas no están amoldadas a ello. Por ejemplo, la App Store tiene escasez para proporcionar diferentes aplicaciones que funcionen en las nuevas gafas de Apple.
Además, otros ciudadanos que se han hecho con el producto creen que provocan fatiga ocular y que a la larga puede ser un problema para nuestra visión. Por lo tanto, Apple tiene aún trabajo por delante para que su producto obtenga la calidad que la compañía desea.