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Mikhaíl Benyash es un abogado con sede en Krasnodar que lleva diez años trabajando en asuntos civiles y penales, sobre todo prestando asistencia jurídica a quienes participan en concentraciones que no han sido aprobadas oficialmente. Un ejemplo es su representación al grupo de de la Guardia Nacional de Rusia, quienes se negaron a ir a Ucrania para luchar en nombre de su país.
A raíz de esta información, cientos de soldados rusos se habrían puesto en o con el abogado para evitar ir a la guerra antes su voluntad. “Mucha gente no quiere ir a luchar”, dijo Benyash al 'Financial Times'. Alrededor de mil personas quisieron estar bajo su amparo jurídico.
Mikhaíl Benyash representaba a los doce de la Rosgvardia, quienes finalmente fueron despedidos por negarse a ir a Ucrania. Los guardias alegaron que no debían ser enviados a Ucrania y que tampoco tenían pasaporte, según Reuters.
Nueve de ellos retiraron su demanda
Estos doce militares demandaron al gobierno de Putin por despido injustificado, pero solo tres siguieron adelante con la protesta. Los nueve restantes retiraron la demanda.
Esta información sale a la luz después de que los medios occidentales y ucranianos digan que las tropas rusas tienen la moral baja. El pasado jueves, la inteligencia de Reino Unido afirmó que los soldados rusos “se negaban a cumplir órdenes, saboteaban su propio equipo e incluso derribaron accidentalmente su propio avión”.
Benyash fue detenido en 2021
El año pasado, Mikhaíl hizo un llamamiento a sus compañeros de gremio para que prestaran ayuda jurídica a los manifestantes durante las próximas protestas. Debido a ese mensaje, el tribunal decidió que había sido una “manifestación no autorizada”.
Un juez lo condenó a cinco días de arresto y se negó a Benyash una preparación de su defensa. En realidad, el objetivo según el entorno del abogado era registrar su ordenador, confiscar su casa y algún objeto sospechoso para las fuerzas rusas.
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