Las imágenes muestran a Daniel Sancho comprando un cuchillo antes del asesinato

El pasado sábado, 5 de agosto, trascendió la noticia de la detención de un joven español por las autoridades tailandesas como presunto asesino de Edwin Arrieta Arteaga, de 44 años. El apresado era Daniel Sancho, hijo del conocido actor Rodolfo Sancho y de quien ahora se han difundido unas imágenes en la televisión del país asiático mientras adquiere un cuchillo poco antes de producirse el crimen.

Casasola, conocido experto en la televisión tailandesa y que comparte sus experiencias en Twitter, fue quien reveló que los medios locales estaban trabajando sin descanso para ofrecer cualquier novedad en la investigación. Al parecer, una de ellas ha logrado unas impactantes imágenes que muestran al acusado en una situación comprometedora.

En un primer momento, tan sólo eran informaciones surgidas en medios allí desplazados, hasta que una de las televisiones locales ha compartido las cámaras de seguridad de una tienda, en las que se ve a Daniel Sancho mientras compra varios objetos, entre los que se encuentra un cuchillo y que supuestamente utilizaría en el descuartizamiento del cadáver de la víctima.

Daniel Sancho y su justificación para el asesinato

A todo ello se han unido las instantáneas del detenido mientras se procedía a la reconstrucción de los hechos junto con las autoridades tailandesas. En ellas se observa al hijo de Rodolfo Sancho sentado en un sofá y con varias pruebas delante. Sea como fuere, el caso se sigue investigando, aunque el propio Daniel Sancho ya itió ante EFE haber cometido el crimen, amparándose en que era un “rehén” de Edwin Arrieta Arteaga y que este le tenía preso en “una jaula de cristal”.

“Me hizo destruir la relación con mi novia, me ha obligado a hacer cosas que nunca hubiera hecho”, dijo ante sus abogadas y algunos agentes. “No me sentí cómodo, pero tampoco forzado. Sentí que tampoco tenía ninguna otra opción. Me tomaron pruebas de ADN y eso es todo”, añadió sobre si fue coaccionado o intimidado para declararse culpable durante el interrogatorio.