Silvia Bronchalo ha visitado la prisión de Koh Samui para encontrarse con su hijo Daniel Sancho. La española, que viajó ayer, 16 de agosto, al país asiático, ha podido ver a su único descendiente tras pasar el período de aislamiento anti-COVID de diez días que ha finalizado este jueves 17 de agosto.
Silvia llegaba en taxi al centro penitenciario acompañada de personal de la Embajada de España en Tailandia. En un encuentro que ha durado una hora y media aproximadamente, ambos han podido hablar e interactuar con un cristal entre medias, aunque se le ha permitido a Silvia no estar en la sala de espera del centro penitenciario.
Es el primer familiar que acude a tierras tailandesas para visitar a Daniel Sancho. Solo había mantenido acercamientos con sus abogados y con los responsables de la prisión, sin contar los interrogatorios con la policía. Después de su presunto asesinato y descuartizamiento a Edwin Arrieta, este encuentro con su madre, que se ha mantenido envuelto en un halo de misterio varios días, por fin se ha producido.
“Silvia no cree que su hijo haya cometido el asesinato”
A la salida de Koh Samui, Silvia Bronchalo lucía unas gafas de sol y no ha dado declaraciones a los medios de comunicación. No obstante, en el programa de Cuatro 'En boca de todos' ha hablado Vicente, una de las personas que ha acompañado a Silvia Bronchalo y que trabaja en la Embajada.
Ha confirmado lo que era un secreto a voces: “Silvia está completamente destrozada y en shock”, aseverando que este encuentro entre madre e hijo “ha sido duro para los dos”. A pesar de las duras pruebas que existen en contra de Daniel, Vicente ha señalado que “Silvia no cree que su hijo haya cometido el asesinato”. La madre, que estará en Tailandia más días, visitará a su hijo todos los días que pueda antes de abandonar el país.
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