En la actualidad, es más que complicado encontrar un hogar en España que no acoja en su interior a algún tipo de mascota. La mayoría tienen al menos un gato o perro, o los dos, y es que se consideran los animales con los que el ser humano tiene más afinidad y que pueden dar más sensación de compañía. Sin embargo, los expertos consideran que hay otros animales que exigen menos cuidados y que pueden ser una opción para tu casa.
Uno de los más populares y que miles de niños piden a sus padres es el hámster, y es que estos pequeños roedores tan sólo necesitan una buena jaula, un cuenco de comida y otro agua. Además, disfrutan con sus juguetes y columpios y no necesitan grandes atenciones por parte de sus dueños. Les basta con salir de vez en cuando a correr y saltar en una habitación cerrada y, al contrario que los perros, no tienes que sacarlos a pasear a la calle.
Otra mascota muy similar en cuanto a cuidados es la cobaya. Puede que no tan comunes como los hámsters, pero lo cierto es que son incluso más independientes que estos. Sus alimentos, eso sí, hay que tener en cuenta que contenga vitamina C y así se mantenga con una buena salud.
Siguiendo con los roedores, es el turno de conocer a los conejos, una mascota muy solicitada por los más pequeños. Como los hámsters, tan sólo necesitan de una jaula con comida y bebida y que los saques de forma recurrente por la casa para que puedan campar a sus anchas y así estirar las patas.
Más allá de los roedores
Una cuarta mascota con cuidados más sencillos y menos exigentes que los de perros y gatos son los peces. Eso sí, en su caso el desembolso es mayor que los de los roedores, puesto que necesitan una buena pecera, cambios habituales de agua, control de la temperatura, etc. No obstante, una vez controles esos pequeños detalles, será una mascota que apenas te quitará tiempo.
Por último, en la lista se encuentran los pájaros, unos animales que tan sólo necesitan comida, bebida y que los sitúes en un lugar ventilado y, a ser posible, con mucha luz. Dentro de este tipo de animales hay muchos tipos, siendo los periquitos, los canarios o los agapornis algunos de los más populares. También es habitual encontrar algunos más 'charlatanes', como por ejemplo los loros.
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