Carmen Lomana, una de las figuras más mediáticas de la sociedad española, ha vuelto a San Sebastián para presentar su libro biográfico 'Pasión por la vida' y ha abierto su corazón en una reciente entrevista con El Diario Vasco, donde reveló algunos aspectos de su vida personal. A pesar de su exposición pública, la socialité mantiene un aire de misterio que la hace aún más intrigante. "Soy muy mediática, pero también un poco misteriosa", afirmó, destacando su capacidad para manejar su fama con discreción, a pesar de estar siempre en el foco de atención. En cuanto a los rumores sobre su actitud hacia los besos, aclaró de manera simpática: "Pero no pongáis que no quiero dar besos porque es que me encuentro con la gente y todo". No obstante, también dejó claro que besa a "quien quiero".
Lomana, a pesar de su vida pública, no es ajena a disfrutar de los pequeños placeres de la vida. En su conversación, compartió su amor Donostia, especialmente por la playa, las islas y las montañas, a los que describió como "mágicos y maravillosos". Esta conexión con los entornos naturales refleja su necesidad de desconectar de la intensidad mediática y disfrutar de la tranquilidad. Sin embargo, no todos los aspectos de la vida la dejan indiferente: aunque confiesa que los fuegos artificiales y disfrutar de una tradición tan española como los toros.
Lomana también reveló los secretos para conseguir conquistarla. "Con cariño, con una rica tortilla de patata, angulas, una merluza... Txangurro me encanta también", confesó, dando a entender que, más allá de su imagen sofisticada, la comida tradicional tiene un lugar especial en su corazón. Con estas palabras, Carmen Lomana deja claro que, aunque su vida esté llena de lujos y glamour, también hay espacio para los placeres sencillos que la conectan con sus raíces y la hacen sentir auténtica.
Comentarios