Países Bajos vive un incendio totalmente inesperado por las autoridades médicas. Según ha informado la asociación de ginecólogos neerlandeses, desde el año 2024 un total 85 personas han donado su esperma de forma masiva. Esto implica que estos donantes tienen más de 25 hijos,el límite según la normativa desde la década de los 90, una cifra que fue reducida a 12 en el año 2018. Este escenario, además de alarmante por las consecuencias genéticas y médicas que puede tener para los descendientes, va en contra de las indicaciones legales actuales.
Desde la fundación Donorkind, que protege los derechos de los hijos nacidos por donación, se han mostrado muy preocupados por este dato. "Estamos hablando de unos 3.000 niños con más de 25 medio hermanos y hermanas. Nunca van a poder tener citas tranquilamente. Si se enamoran de alguien, siempre tendrán que hacer una prueba de ADN", ha explicado Ties van der Meer, uno de los responsables de este organismo.
Des el pasado 1 de abril, la nueva normativa establece que el registro de los donantes de esperma se produzca a nivel nacional. Hasta entonces, los datos se almacenaban únicamente en las clínicas de fertilidad, lo que facilitó que muchos centros médicos usaran, sin conocimiento de las madres, el mismo semen en distintas donaciones.
Multa de 100.000 euros por cada hijo nuevo
La situación en Países Bajos no es anecdótica y algunos donantes superan, por mucho, la cifra máxima permitida de descendientes a través de este proceso. La horquilla principal está entre 26 y 40 hijos, pero hay casos realmente llamativos. Jonathan Meijer presume de tener, a los 43 años, 550 hijos. De hecho, se enfrentó a una demanda por parte de los padres de estos niños y la justicia le obligó a parar. Además, le impuso una multa de 100.000 euros por cada hijo suyo por donación que naciera a partir de entonces.
Comentarios