Stefan Küng fue el triste protagonista del Campeonato de Europa de contrarreloj a consecuencia de la grave caída que padeció. El suizo golpeó a mucha velocidad con una de las vallas de la parte final del recorrido y su estampa con la pantalla del casco destrozada y lleno de sangre causó impacto.
El ciclista del Groupama iba totalmente acoplado en su bici de crono y chocó. A consecuencia del impacto sufrió una conmoción cerebral y fracturas en el pómulo y la mano. Ahora, en declaraciones a la televisión suiza SRF, ha analizado lo ocurrido y los motivos del duro impacto que sufrió.
En una contrarreloj, recorro entre cincuenta y sesenta metros en unos segundos.
"Creo que fue un error de orientación. Durante una contrarreloj, estoy casi a ciegas. Sólo puedo ver unos pocos metros delante de mí debido a la posición que tengo que ocupar. Así que tengo que confiar en las instrucciones que me llegan por radio desde el vehículo de apoyo. Esta vez no llegaron y simplemente seguí la línea blanca en la carretera, pero las barreras se cerraron un poco. Revisamos la situación, pero todo pasó muy rápido. En una contrarreloj, recorro entre cincuenta y sesenta metros en unos segundos. Cometí un error y caí al suelo antes de darme cuenta", confesó el helvético
Perdí mi anillo de boda. En las fotos de la caída se ve que aún lo llevo en el dedo. Pero en Saint-Gallen, cuando me quitaron el yeso, ya no estaba
El ciclista sufrió un golpe moral tras la caída: "Perdí mi anillo de boda. En las fotos de la caída se ve que aún lo llevo en el dedo. Pero en Saint-Gallen, cuando me quitaron el yeso, ya no estaba. No sé si se quedaría en el hospital en Países Bajos, no recuerdo bien esos momentos
Pese a ello, Küng no quiso abandonar y finalizó en la undécima posición, a 1 minuto y 29 segundos de Tarling, ganador de la prueba.
