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Hace décadas, hubiese parecido imposible que un fabricante de coches buscara los planos de un modelo que dejó de vender en 1930 para volver a fabricarlo. Porque lo que ha hecho Bentley no es inspirarse en un modelo de entonces y reeditarlo en una versión moderna, con la tecnología y los sistemas de seguridad que requiere un coche actual. Lo está volviendo a construir (y a vender) tal cual hacía hace 94 años, con la misma tecnología, los mismos materiales e incluso los mismos procesos de construcción.
Este viejo-nuevo coche es el Bentley Speed Six Continuation Series (lo de 'Continuation Series' hace alusión a que continúa la saga de hace nueve décadas), uno de los modelos que asentaron la prestigiosa leyenda del fabricante británico. Los aficionados a la marca lo reconocen como el coche de carreras de mayor éxito de la marca y no solo por su rapidez, sino por su extraordinaria fiabilidad.
Construido a mano por artesanos
El Speed Six se está fabricando completamente a mano desde cero por medio de técnicos y artesanos de la marca, y con la ayuda de proveedores especializados a los que se les ha encargado la fabricación de piezas (faros, volantes, pedales...) idénticas y del mismo material que las que llevaba el citado Bentley.
De hecho, la nueva tirada de Bentley Speed Six tenía que ser hasta tal punto idéntica que el equipo de coches clásicos de Bentley (Mulliner Classic) ha realizado escaneados por láser pieza por pieza para tener todos los datos en 3D de la carrocería y de cada componente. Y, cómo no, replicando al final incluso las cinco pinturas con las que se vendía el coche en la década de los años 20 (y en 1930) del siglo pasado.
6 cilindros y 6,5 litros
El motor no quiere saber nada de turbocompresores o inyecciones directas. Y mucho menos de electrificación: se trata de un 6 cilindros en línea de 6,5 litros que hace nueve décadas entregaba 200 CV. Tenían claro en Bentley que esta potencia se podía haber afinado al alza utilizando materiales más modernos, pero renunciaron a ello utilizando al detalle las mismas técnicas y materiales. Eso sí, se han encontrado con que estos nuevos modelos entregan en el banco de potencia 205 CV, una diferencia que resulta casi simbólica.
Solo se van a fabricar 12 modelos, todos ellos a mano y con una dedicación que requiere ocho meses por coche. El primero de ellos es este que ves, terminado en color Parsons Napier Green, con faros protegidos por una malla protectora y un gran número 4 en el radiador, y combinado todo ello con cuero y moquetas Rust de color marrón.
Su propietario, el primero que compra un Bentley Speed Six en 94 años, es un ciudadano de Estados Unidos llamado John Breslow al que no le debe ir mal en lo económico, ya que el precio (que no se ha dado a conocer) podría acercarse a los dos millones de euros.