Este miércoles 21 de septiembre ha habido cinco nuevas citas en el restaurante de 'First Dates' y en una de ellas, María y Ángel han tenido una buena sensación al conocerse en 'First Dates' y por ello han comenzado su cita con ganas. Pero estas se han ido apagando a medida que iba transcurriendo la cena y los temas de conversación, han visto que tenían ritmos de vida totalmente diferentes.
Ángel es un hombre de campo, feliz en la naturaleza y que se va al monte para escaparse ya que “allí no hay chicas”. Ha explicado que el mayor error de su vida había sido aprobar la oposición de ingeniero. Consideraba que se había quedado parado. El soltero hablaba de cómo le había ido en el amor y se definía como “el chico del café y el no” ya que todas las que se toman un café con él salen corriendo.María le ha escuchado atentamente y ha visto en él un tipo agradable pero no le cuadraba con su estilo de vida. Ella era muy dinámica y habladora. Ha explicado que era una mujer a la que gustaba hablar, viajar, salir con sus amigas, hacer planes y hablar mucho.
María aprovecha para mandar un saludo a sus amigas: algo nunca visto en 'First Dates'
La soltera no estaba nada nerviosa y aprovechando que estaba en televisión y viendo que su cita con Ángel no iba a terminar en nada más, se ha venido arriba para hacer algo que nunca se había visto en la historia de 'First Dates'. Y cuando le estaban preguntando sobre cómo estaba yendo la cena, ha decidido que prefería hablar para otra cosa. Y le ha pedido al programa que sí podía mandar un saludo a sus amigas con las que hace muchos planes: “¿Puedo saludar?”.
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