Destroza cinco coches, pierde una rueda y encima trata de fugarse

Hay veces que ni siquiera dejando el coche bien aparcado, en una zona en teoría de fácil y con suficiente distancia entre coche y coche puedes quedarte tranquilo.

Quienes lo han podido comprobar de forma reciente son varios conductores que esta semana pasada dejaron aparcado el coche en la Vía Favencia de Barcelona y que fueron a recogerlo con unos daños tan increíbles como incomprensibles, teniendo el coche como lo tenían estacionado.

En el vídeo se ve una Ford Transit Courier que es la mejor parada (una luna lateral rota); un Kia Ceed al que le han destrozado el flanco trasero izquierdo; un Peugeot 208 al que incluso le han cortado la aleta y la puerta traseras de lado izquierdo; un Seat Ibiza que mucho nos tenemos que acabará en el desguace (le ha dañado hasta el eje trasero, además de los destrozos de chapa) y un Volkswagen Golf VI con daños en el lateral, pero menos graves que los tres coches precedentes.

La mayoría de estos daños los causó un camión con su parte fronto-lateral, aunque también actuó la caja de transporte cortando algún coche como si fuera una cuchilla.

Había espacio de sobra

Como se ve en el vídeo, el ancho de la vía en aquel punto es considerable, hasta el punto de que podría pasar sin problemas un camión de gran tonelaje o un autobús urbano. Y en caso de haber sido estrecho, un conductor prudente habría pasado con su camión muy despacio, de forma que en caso de producir algún daño este hubiese sido leve.

Es evidente que el conductor del camión perdió el control del vehículo y que además circulaba con gran rapidez, pues de lo contrario no hubiese podido causar semejantes daños a cinco vehículos. Es más, el camión, un Iveco de pequeñas dimensiones, incluso perdió una rueda, lo que no le impidió tratar de abandonar la escena.

Eso sí, no pudo llegar muy lejos y dejó los daños en el propio camión como prueba de su autoría. A estas alturas, suponemos que el conductor ya habrá sido identificado por la policía local.