- Decisión. Lewandowski deja entrever que su elección es el Barcelona
- Economía. Laporta se plantea hacer una rebaja salarial que no será general ni lineal
El Barcelona lleva muchos meses trabajando en la planificación de la próxima temporada. Ya tiene cerrados los fichajes de Christensen y Kessié, pero no puede anunciarlos porque está atrapado con la masa salarial y por la dificultad que está encontrando para cerrar bajas y aclarar el futuro de algunos de sus futbolistas. No puede inscribirlos, el club está bloqueado. Pero entre tanto infortunio, los ejecutivos se relamen ante la total predisposición de Robert Lewandowski por firmar por el conjunto catalán. Es el gran fichaje que ambicionan y hacía tiempo que un profesional no se posicionaba de forma tan contundente para sumarse al proyecto culé.
Cada vez que el internacional polaco hace declaraciones, evidencia que ha tomado una decisión que no tiene vuelta atrás: no quiere cumplir el año que le resta en Múnich y desea vincularse al Barça. Es lo único que tiene en la cabeza. No le importa que desde el Bayern le recuerden que todavía tiene contrato y que le esperan el 8 de julio para hacer la pretemporada. Lewandowski ha roto con la entidad germana y muestra su firme intención de ser azulgrana, para regocijo de la Junta de Laporta.
Ya no se trata de que el goleador esté tensando al máximo la cuerda, es que la ha hecho añicos. "Quiero dejar el Bayern para tener más emociones en mi vida. Algo ha muerto en mí" o "mi etapa en el Bayern ha acabado. No veo ninguna posibilidad de seguir mi carrera allí. La mejor solución es una salida. Espero que no me retengan" son sólo algunas de las afirmaciones que ha realizado en las últimas horas en diferentes medios. Además, y según apuntan en Alemania, ya ha dejado claro que no estará el día 8 para arrancar la pretemporada. A esas alturas del verano, confía estar en el Camp Nou.
Toque de atención
Este posicionamiento y estas palabras no han gustado en Múnich. Según Bild, el director deportivo, Hasan Salihamidzic, ha hablado en las últimas horas con el polaco para pedirle explicaciones sobre esta firme postura y por sus afirmaciones. Le ha reiterado que tiene contrato.
Limitaciones económicas
En cambio, esta contundencia ha sorprendido, gratamente, en el Barça, donde, lógicamente, aceptan con júbilo su determinación. Su postura, creen, ayudará a rebajar su precio, que parece difícil que baje de los 50 millones de euros. Pero en los despachos también aplauden que el veterano profesional polaco, que en agosto cumplirá 34 años, esté dispuesto a firmar por la entidad catalana después de saber los problemas salariales del vestuario. Su contrato será destacado, pero comedido y ajustado a la nueva realidad de la institución azulgrana. Lewandowski es a día de hoy, la gran fuente de alegría en el Barcelona.
Rebeldes
Ousmane Dembélé, cuya renovación sigue también parada, es el último jugador que forzó su fichaje por el Barcelona negándose a ejercitarse con el Borussia Dortmund. Antes también presionaron para jugar en el conjunto culé futbolistas como Coutinho o Mascherano: ambos reclamaron el transfer request.Son muchos los jugadores que fuerzan las salidas de sus clubs, pero en pocas ocasiones son tan contundentes e insistentes como lo está siendo Lewandowski.