En uno de esos tiros que la memoria no borra y que se rescatará cuando hechos parecidos acontezcan, Russell Henley embocó un eagle en el hoyo 16 de Bay Hill, santuario de Arnold Palmer, para voltear el torneo que da nombre 'The King' y batir a Collin Morikawa, que había llegado al domingo con un golpe de ventaja y que a falta de cuatro hoyos sacaba tres golpes al ganador.
Un chip, que recorrió todo el green hasta embocar en el agujero, permitió a Henley reengancharse a la senda de las victorias en el PGA Tour y sumar la cuarta de su carrera, que se había detenido en noviembre de 2022 cuando se impuso en el World Wide Technology Championship. El de Macon concluyó en 11 bajo par, un golpe menos que Morikawa.
En 2025, Henley había emitido señales de gran progreso. Tras ser quinto en Pebble Beach y sexto en el Cognizant Classic, el antiguo Honda, era de los jugadores que los analistas señalaban como candidatos inmediatos a una victoria. El éxito le sitúa por primera vez en su carrera en el top 10 mundial. El lunes aparecerá en la lista como el número 7.
El Arnold Palmer, torneo sin corte, uno de los elevados a 20 millones de dólares en el pulso que desde hace dos temporadas mantienen con el LIV Golf, asistió además a un domingo pletórico de Keegan Bradley, el capitán del equipo estadounidense de la Ryder Cup. Firmó 64 golpes, 29 por los nueve primeros con cinco birdies y un eagle, y acabó en cuarto lugar. El número 1 mundial Scottie Scheffler acabó undécimo y Rory McIlroy, decimoquinto.
Comentarios