E.T. the Extra-Terrestrial es desenterrado. Imágenes del documental de Xbox.
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Cuenta la leyenda que en 1982 se lanzó un juego tan, tan, tan malo que acabó enterrado en un desierto de Nuevo México para que nada ni nadie pudiese hacerse con una copia de él. Y no, no es una broma. Aquel año, Atari puso a la venta E.T. the Extra-Terrestrial. Queriendo aprovechar el éxito de la película, le dieron a su equipo menos de dos meses para terminar su desarrollo. Como es lógico, fue un completo desastre. Tanto es así que, tras su lanzamiento, se estima que las pérdidas fueron superiores a los 500 millones de dólares.
En su momento, se produjeron unos 4 millones de cartuchos, y Atari gastó solo 25 millones en adquirir los derechos pertinentes para producir la adaptación para consolas. Fue una debacle. Es aquí cuando uno se pregunta qué era lo que esperaban. Por muy buena que fuera la película, era imposible que la gente pasase por el aro con un juego tan, tan, tan, tan malo. Era imposible que nadie hiciese algo decente en 5 semanas, así que la culpa fue única y exclusivamente de los inversores que decidieron que dos meses eran tiempo más que suficiente.
E.T. the Extra-Terrestrial, el peor juego de la historia
Xbox desenterró E.T. the Extra-Terrestrial del desierto y dio luz a una leyenda
El caso es que las cosas fueron extremadamente mal hasta el punto en que Atari decidió enterrar gran parte de las unidades producidas en un vertedero del desierto Alamogordo, en Nuevo México. Por aquel entonces, se pusieron sobre la mesa dos ideas. Por un lado, se estimó que era un método para beneficiarse de diversas exenciones fiscales. Las malas lenguas dijeron que en realidad estaban tan avergonzados que quisieron ocultar esa parte de historia. La primera tiene mucha más lógica, y es probable que fuese la verdadera razón, pero la segunda es más "bonita" cuando lo planteas todo como un mito.
Y es que, en efecto, todo esto fue poco más que una leyenda durante muchos años. La historia era demasiado inverosímil como para ser cierta. Por suerte, el ser humano es una entidad curiosa. Así pues, años después, se decidió realizar una excavación para determinar si aquello era real o no. Y sí, lo era. En 2014 se encontraron las legendarias unidades de E.T. the Extra-Terrestrial en ya mencionado desierto de Nuevo México.
Curiosamente, la encargada de ejecutar esta excavación fue Xbox a través de Microsoft, puesto que querían rodar un documental sobre el mito de E.T. the Extra-Terrestrial y su enterramiento. Finalmente, lograron demostrar que era cierto, dejándonos con una de las historias más curiosas que ha dado de sí la industria del videojuego en toda su historia. El proceso quedó completamente registrado, así que hoy día podemos recrear aquel momento sin problema alguno.