Petardazo y mal arreglo 3qj5t
jueves, 7 abril 2016, 10:25 5b5k1j
Sigan a ese chico. Se llama Draxler y atorment a Danilo. Y, por extensin, al Real Madrid, que olvid en Wolfsburgo sus buenos principios. No qued nada de su actuacin en el Camp Nou, donde ofici con la tica de trabajo que nunca demostr frente a un rival que se exprimi. Fue el Real Madrid roto y confundido que tanto haba decepcionado esta temporada. Fracas en todas las zonas del campo y permiti dos goles en la primera media hora. Dispuso de una hora para recuperarse y reaccionar, para enviar un mensaje de autoridad, pero no lo hizo. Jug tan mal que Benaglio solo se sinti comprometido en un remate que Cristiano no consigui embocar.
El fracaso se midi en todos los aspectos. La defensa se estrell y los centrocampistas nunca marcaron el paso del encuentro, aunque la pista era sencilla. El Real Madrid comenz con soltura, pero muy pronto destap un problema capital: el marcaje a Draxler. Despus de cinco aos como gran promesa del ftbol alemn, Draxler se marc el clsico partidazo que le coloca entre los jugadores ms apetecibles en el mercado mundial.
Aunque no es extremo, se coloc en la banda izquierda, cerca de la raya, y no se movi de all. Tuvo la virtud de la paciencia, cualidad que no acompa a Gareth Bale, que destroz a Vierinha en las antpodas del campo, pero no aguant la impaciencia. En los ltimos 20 minutos se desplaz al centro de la delantera y fue engullido por Naldo, Dante y Luiz Gustavo. El Wolfsburgo interpret perfectamente lo que necesitaba, buscar a Draxler. Fue un equipo inteligente. El Real Madrid requera lo mismo: descargar el juego sobre Bale. No lo hizo. Fue un equipo muy poco inteligente.
Se anticipaba la superioridad del Real Madrid y la sospecha se confirm en los primeros minutos. El Wolfsburgo, un equipo sin tradicin en la Copa de Europa, se agrup atrs y esper la ofensiva madridista. Lleg sin prisa, pero con inteligencia. Lo mejor del Real Madrid ocurri en el arranque del encuentro. El rbitro desde un penalti a Bale, Cristiano amenaz en un gol anulado y Benzema firm la mejor jugada del encuentro. Dej clavado a Dante y exigi la fenomenal intervencin de Benaglio en el mano a mano. El portero suizo desvi el tiro in extremis, con la puntera del pie.
Karim, lesionado
Lo ms notable de la jugada es que Benzema estaba cojo. Un tarantantn de Naldo le dej tieso. El problema se vio despus. El delantero francs permaneci en unas condiciones miserables durante 22 minutos. No volvi a oler la pelota. Son concesiones que no se pueden hacer en la Liga de Campeones, en un partido crucial para el Real Madrid. Le sustituy Jes y en el aire qued la duda de la eficacia del cambio. A esas alturas, el Wolfsburgo haba marcado dos goles y pareca ms robusto en el medio campo que el Madrid. Quiz la presencia de Isco o James hubiera mejorado al equipo en dos aspectos: ms densidad en el medio campo y mejores pasadores para Bale y Cristiano.
La ventaja del Wolfsburgo deriv de su capacidad para aprovechar las concesiones del Real Madrid, un equipo capaz de exigirse y cumplir con todas las obligaciones frente al Bara, pero no frente a un rival que ha decepcionado en el Bundesliga. La desconexin entre las lneas no tuvo explicacin. Tampoco el desinters de los delanteros por colaborar en el captulo defensivo. Danilo y Marcelo pasaron un infierno frente a Draxler y Bruno Henrique en el primer tiempo. Por primera vez en mucho tiempo, Modric pas inadvertido. Fue sustituido en la segunda parte, y eso son palabras mayores cuando se habla de Modric. Por lo dems, Kroos fue Kroos en su versin alemana oriental: fro, correcto, previsible.
Algo raro tiene que suceder para que la mejor conexin del encuentro la establecieran Draxler en una banda y Bruno Henrique en la contraria. Nada menos que 60 metros de distancia. Sin embargo, Draxler consigui ar varias veces con el brasileo, sin ninguna oposicin. Nadie ocupaba el espacio central. Nadie interceptaba esa ruta tan sencilla de bloquear. Por ah lleg el segundo gol. Draxler traz una fcil diagonal, divis a Bruno Henrique en el costado derecho y le entreg el pase. La segunda parte de la jugada comenz con la absurda posicin de Marcelo, que cerr tanto que se convirti en defensa central. Bruno Henrique se sinti tan libre de marcaje que no tuvo problema alguno para cruzar el pase. Arnold lleg desde segunda lnea, se adelant a Sergio Ramos y clav el remate a quemarropa.
Danilo, sealado
La jugada revel el plan del Wolfsburgo y el desastre defensivo del Real Madrid. Fue un partido que pesar mucho sobre Danilo. Se derrumb. Draxler le tritur con su zancada elegante y su finura en el regate. Cuatro das despus de la exhibicin de Carvajal en el Camp Nou, daaba a los ojos verle en el banquillo. No es la primera vez que la ausencia de Carvajal produce efectos desastrosos. El Real Madrid tard mucho tiempo en recuperarse de la lesin del lateral derecho en el Manzanares, en la primera vuelta de la Liga. Es un jugador que rara vez defrauda en las grandes ocasiones. Danilo, s.
El tanto de Arnold sucedi al dudoso penalti a Schrrle. La jugada fue diseada por Draxler, ante la inoperancia de Danilo. All termin el airoso despliegue inicial del Real Madrid. Se hundi sin razn alguna. Sorprendi su incapacidad para entender que tena un sencillo recurso. Ni tan siquiera necesitaba jugar bien. Bastaba con lograr que la pelota desembocara en Gareth Bale. Su ventaja sobre Vierinha era de tal calibre que cada jugada generaba un incendio. Daba lstima el pequeo lateral ante la exuberancia del extremo gals.
No habla bien del plan de un equipo, o de su inteligencia, la cerrazn para no aprovechar las ventajas evidentes. La de Bale sobre Vierinha era mayor an que la de Draxler sobre Danilo. Sin embargo, el Madrid gir la vista hacia otro lado. Se empantan y jams coloc en dificultades a la defensa del Wolfsburgo, integrada entre otros por el veteransimo Naldo y por Dante, un central ms rgido que el cemento armando.
El ingreso de Isco gener alguna expectativa, por ejemplo en un fenomenal pase a Cristiano, que no logr superar a Benaglio. Faltaba una eternidad de partido, pero all termin la produccin ofensiva del Real Madrid, condenado a un sufrimiento imprevisto. Schrrle no cerr con el gol un gran contragolpe y Marcel escap vivo de dos absurdas agresiones a Arnold. Se interpretaron como el precio a su psimo partido, a la prdida de papeles del equipo y a la angustia ante un resultado que no es insuperable, pero que obliga al Real Madrid a algo que nadie esperaba: una noche de campeonato en el Bernabu.
