El Barça vio con muy buenos ojos su enfrentamiento de Playoffs ante el Mónaco. Dio por muy bueno su quinto puesto, que lo es, y el duelo contra el equipo de Spanoulis, a priori el más asequible de los cuatro primeros. La realidad está siendo muy distinta.
El Mónaco, y ya se sabía, es un equipazo, sólido, físico y con mucho talento en sus jugadores. Excelentemente bien dirigido desde la banda por la leyenda griega y con un hambre especial por estar de nuevo en la Final Four.
Eso quedó patente en una de las jugadas del segundo partido protagonizada por Mam Jaiteh. El interior francés firmó el mejor partido e su carrera deportiva con 20 puntos y 27 de valoración en un marco tan extraordinario como un segundo partido de Playoffs, pero además dejó una de las acciones del choque y de la serie demostrando el deseo del Mónaco de estar en la Final Four por segunda vez en su historia.
Se trataba de un rebote largo tras un triple fallado. Jaiteh luchaba con Fall por la posición, pero el balón salió hacia una banda. El jugador del Mónaco saltó para salvar la posesión, cosa que hizo, pero su cuerpo acabó engullido por sus propios compañeros al saltar la valla publicitaria.
Los jugadores del Mónaco, sin perder un segundo, ayudaron a Jaiteh a emerger y volver a la pista, cosa que hizo el francés para colocarse de nuevo bajo el aro del Barça y ser testigo de que su acción valía tres puntos anotados desde una esquina por Strazell. Jaiteh, celebrando la canasta, se dirigía hacia sus compañeros a los que dedicaba la acción y agradecía por su ayuda al levantarlo.
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