martes, 26 mayo 2009, 01:01 2c1q35
La cada del Newcastle (y otras historias Premier) 6bi3a
El descenso del Newcastle es, como no poda ser de otra forma, el asunto del da en Inglaterra. Las columnas de opinin se dedican a analizar el desastre del tercer club que ms gente lleva a su estadio en el pas -y, como tampoco poda ser diferente, no ahorran dureza alguna en sus comentarios-. Se pone mucho nfasis en un aspecto: el club se ha gestionado con ms corazn que cabeza, con voluntad pero sin tener un plan deportivo claro y estructurado. No se le puede negar al multimillonario Mike Ashley que ha puesto empeo e ilusin, pero ha acabado sucumbiendo a su propia caricatura: la del hincha vestido con la camiseta del club bebiendo cerveza con los amigos, muy lejos de la aparente frialdad que un dirigente necesita para tomar las decisiones correctas. No le han salvado ni los grandes mesas de la patria. Se entreg a Kevin Keegan y a Alan Shearer, idolatrados en Saint James' Park y vctimas de una nula planificacin. Una plantilla desequilibrada, viejas glorias sin rendimiento actual, lesiones de jugadores importantes y una creciente sensacin de haber cado en un pozo sin salida han condenado a un club de masas a jugar en segunda. Siempre ocurre en estos casos: la aficin jura fidelidad y se convierte en el mayor activo de la entidad. Lo he podido comprobar esta tarde cuando Simon, un hincha del Newcastle que vive en Barcelona, se ha presentado en la oficina con la camiseta de su equipo. No lo haba hecho nunca, pero hoy tocaba. Con orgullo, porque uno debe presumir de amor a unos colores sobre todo el da que pierde.
Y eso que el Hull lo puso fcil
Peor an: el Newcastle baja en un ao en el que la permanencia estaba baratsima. El Hull se ha salvado con 35 puntos, despus de haber sumado slo 2 en las ltimas 9 jornadas. Lo del equipo de Phil Brown es increble: en un inicio alucinante, consigui 20 puntos en los primeros 9 partidos. En el resto de la liga ha conseguido... 15. 15 puntos sobre 87 posibles, un registro pauprrimo que ha demostrado la realidad de una plantilla a la que probablemente la categora le vena grande y a la que se le acab el ftbol cuando volvi a la tierra, cuando se pasaron la euforia y el entusiasmo de los primeros das en el cielo. Me alegro por mi amigo Paul y ayer lo felicit, pero sabiendo cmo son los segundos aos y viendo la dinmica con la que ha acabado el equipo, creo que es comprensible que los tigres sean desde ya los principales candidatos al descenso la prxima temporada.
Middlesbrough y West Brom: cuando el descenso es sereno
Los otros dos equipos que pierden la categora no han cesado a su entrenador a lo largo de toda la temporada. Es ms: todo parece indicar que tanto Gareth Southgate como Tony Mowbray pueden seguir en sus cargos. En el West Brom se mantienen fieles al tcnico que los subi y reconocen su gran trabajo: si no se puede hacer ms, si el equipo ha luchado, por qu hablar de fracasos y de ceses? En el Boro, un clsico de primera de los ltimos tiempos, demuestran confianza absoluta en un tcnico que est sacando a muchos futbolistas jvenes. Ha descendido con una plantilla superior a las de Stoke o Hull, pero rechazan dramatizar la situacin: entienden algo as como que el ftbol es competicin, y que cuando en una liga hay veinte equipos buenos, forzosamente tienen que bajar tres equipos buenos. Y si ellos se sienten buenos, slo les queda levantarse y volver a pelear.
Excelente noticia: subi el Burnley de Coyle
Ya que no pudo ascender el Swansea, me alegro de que haya logrado subir a la Premier el Burnley, ese equipo que nos maravill en la Carling Cup con un ftbol de muy buen gusto. Recuerdo, sobre todo, la gran primera parte que hizo en White Hart Lane, en la que le dio un bao al Tottenham jugando al toque. Fue, de verdad, uno de los momentazos que ms me ha impresionado en todo el ftbol que he visto esta temporada -por mucho que en la segunda parte los spurs remontaran-. Su entrenador es el irlands Owen Coyle y fue elogiado incluso por Arsne Wenger. Podemos estar ante los primeros pasos de un tcnico de xito. De momento, su trabajo no ha pasado inadvertido y ya suena como posible candidato a suceder a Gordon Strachan en el Celtic.