viernes, 31 octubre 2008, 19:34
Una llamada desde Auckland 555u3d
La voz de Xavi Roca llega con retraso, sus respuestas vienen precedidas por largos silencios, tiempos de espera, blancos que dibujan una distancia tan lejana que casi se escapa de los límites humanos. Es lo más parecido a hablar con el espacio, pero él se encuentra en este mismo planeta, en el extremo opuesto. Recuerdo cuando me enteré de su aventura. Xavi se va al extranjero, me dijo un amigo. Intenté acertar. La respuesta, siempre la misma: No, más lejos. Más lejos. Hasta que no pude llegar más lejos. Hasta que nombré lo más lejano. Nueva Zelanda. Auckland City.
Hay futbolistas que entrenan, juegan, se van a su casa y desconectan. Otros lo viven con una pasión continua, eterna, transversal. Xavi Roca, 34 años, podría haberse cansado de este juego después de su experiencia en primera división con el Villarreal y el Espanyol. Podría pensar que ya lo ha hecho todo, pero mantiene la misma ilusión con la que creció en la cantera del Barça y que lo llevó a debutar con el primer equipo. Por eso no le importó irse a jugar a Segunda B, a Tercera, a Oceanía ahora. Porque mantiene el hambre, las ganas de competir, porque ama el fútbol. Porque quiere seguir escribiendo capítulos.